Libro: Cinco Esquinas - Mario Vargas Llosa

El pequeño libro Cinco Esquinas[1] del escritor peruano Mario Vargas Llosa, es una novela política. El libro de que intenta habla sobre los poderes, los chantajes, la corrupción, el manejo de ciertos medios de comunicación y, también el escritor nos relata las quejas del terrorismo visto por una familia pudiente económicamente.

El escenario es en Lima principalmente. El relato se desarrolla durante el gobierno del dictador y corrupto Alberto Fujimori durante la década de los 90 en el Perú. Los personajes en Cinco Esquinas esta desde los empleados del diario sensacionalista “Destapes”, un empresario cervecero y, otro minero. Ambas con fortunas económicas que tienen a sus esposas quejándose del terrorismo, mientras se dan los gustos de la vida fuera del Perú. Chabela y Marisa son amigas y esposas de los empresarios Luciano y Quique, respectivamente. Mientras viven en la opulencia, las dos mujeres por temor a ser intervenidas por la policía durante las horas de toque de queda, tuvieron que pasar la noche juntos. Los empresarios conservadores religiosos lo que condenan públicamente, es moneda corriente en sus vidas privadas. Lo que la religión católica llama y condena el adultero, infidelidad o de perversión sexual, orgias, etc.; en Cinco Esquinas es un evento cotidiano.

Las practicas de empresario muy reñidas por una sociedad cuando se hacen públicos, es para hacer pasar momentos de desgracias, decepción, tristeza, vergüenza, etc. para toda la familia y su entorno. 

Los chantajes pueden llegar fácilmente si se tiene una prueba de un acto contra la moral de toda una sociedad. Eso es lo que hace el periodista Rolando Garro, director de “Destapes”, un diario al mismo o peor estilo de los diarios limeños faranduleros controlado y dirigido por el gobierno fujimorista, con los texto exagerados de Retaquita, la redactora estrella. 

Voy a citar algunos pasajes del libro, solo para que los sociólogos, historiadores puedan negar o confirmar lo que Mario Vargas Llosa escribe en esta novela:

"Hay en esta ciudad [Lima, ndlr], usted [Enrique Cárdenas, conocido por su mujer como Quique, ndlr] lo sabrá de sobra, gente que quiere hacerle daño. por su prestigio, su poder y su fortuna. esas cosas no se perdonan en el Perú. La envidia y el resentimiento florecen aquí con más fuerza que en cualquier otro país".[2]
"Algo que los peruanos hacían muy bien: lamer los zapatos que los pateaban. ¿La prueba? Fujimori y el Doctor". [3]

"El morbo es el vicio más universal que existe". [4]
"El Perú entero podría satisfacer su curiosidad morbosa, su apetito chismografía, ese placer inmenso que produce a los mediocres, la mayoría de la humanidad, saber que los famosos, los respetables, las celebridades, los decentes, están hechos también del mismo barro mugriento que los demás". [5]
Otra realidad de lo más triste, es en cuanto a los hostigamiento o acosos sexuales que sufren las mujeres en los medios de transporte común. La periodista de "Destapes" reacciona casi de la misma manera con la que reaccionan las mujeres egipcias que se ven el la película Les Femmes du bus 678 (Las mujeres del bus 678).

Los empresarios que dominan en el Perú y, que se confabulan con el gobierno o con las autoridades claves de algún sector, son capaces de asesinar a periodistas cuando se hacen público sus actividades ilícitas. En Cinco Esquinas, aunque es una novela no tan bien cautivante, nos permite entender o tener una idea de cómo al menos fue los 10 años del fujimorismo en el Perú. Desde ese punto, es apreciable el libro, pero en materia editora (Alfaguara), deja mucho que desear, porque al parecer no hay una rigurosidad en las correcciones.  

Cinco Esquinas, recomiendo leer a los jóvenes que no vivieron esa época y, a los que sí, para que de una manera novelesca, al menos se puede recordar un poco la historia del Perú y, como puede ser asesinado un periodista solo por "sacar a la luz pública las inmundicias que podían permitirse los ricos de este país sin leyes y sin moral" [6]. 

Nota:
[1] Mario Vargas Llosa, Cinco Esquinas, Editorial Alfaguara, 220 páginas, 2016, Lima.
[2] id. p. 16
[3] id. p. 36
[4] id. p. 66
[5] id. p. 67
|6] id. p. 127

El grupo Pachacámac y su nuevo paradigma de hacer música

El grupo Pachacámac dignifica el legado de los Incas o peruanos de ayer, hoy y del mañana.

Entres sus programas culturales de la Casa de la Literatura Peruana, no solo es lectura o libros, sino también música y poesía. Y, en esta oportunidad la que encajaba perfectamente a este fin, fue Pachacámac para el 'concierto de música peruana ancestral y contemporánea'. El público tuvo la oportunidad de enriquecerse y nutrir el espíritu con las canciones producidas con más de 5 decenas (tienen mucho mas) de instrumentos durante una hora y media completamente gratuito en la noche del sábado 16 abril 2016. 
El cuarteto Pachacámac. 16/04/2016.

El tipo de música que crean, interpretan, investigan y componen los miembros del grupo Pachacámacen su gran parte es aquel que esta íntimamente ligado a la historia pre Inca, Inca y al periodo actual. Mucho más que hacer "música andina de proyección" desde mi perspectiva, lo que hace en realidadPachacámac es "música Tahuantinsuyana" principalmente. Tahuantinsuya porque no solo se hace uso de instrumentos ancestrales o milenarios de los pre Incas e Incas, sino también por la atmósfera que envuelve a Pachacámac, es aquella que se transmite en oposición a lo que el filósofo C. Godin lo describe bien en su libroLa haine de la nature(traducción literal: El Odio a la Naturaleza. Leer:la entrevista a Sylvia Falcón); es decir la transmisión de la filosofía de la gran civilización de los Incas.

Pachacámac con un nuevo paradigma de hacer música

Escuchar las melodías o los sonidos convertidos en música con la Tinya, el bombo andino, la cortina de caracoles, las conchas marinas, las semillas, las sonajas, los raspadores de mate, los palos de agua, las vainas de semillas, las piedras, las Quenas y Quenillas Incas, trompetas de caracol marino (Pututo), los Pinkuylos, las Tarqas, el Quenacho, la mamaquena de caña, silbatos de barros, las Antaras, la vasija silbadora de cerámica de las culturas Moche, Vicus y Chimú, etc. Y, adicionados las letras; es como hacer un dialogo con lo invisible, con la naturaleza, con la historia; es ir hacia las raíces de las montañas de lo que hoy es América (Perú, Bolivia, Ecuador, Argentina, Chile, etc.). 
Algunos instrumentos de Pachacámac. 16/04/2016.
La música de Pachacámac, frente a una vasta (pero muy poca propuesta mejorada y trabajada) producción de otros grupos o artistas, invita repensar en la forma de hacer música. La propuesta de Pachacámac pone en vitrina muchos instrumentos que hoy en día los músicos comerciales probablemente ignoran. El trabajo de Pachacámac, es lo que hacía mucha falta. Su presencia en el ámbito musical definitivamente dignifica y poner en la vitrina el legado de los Incas de ayer, hoy y del mañana para seguir avanzando de manera positiva como una sociedad con identidad en este mundo globalizado. Con todo esto, Pachacámac tiene un nuevo paradigma de hacer música.

Si ustedes estimados lectores tiene la oportunidad de ir a ver el espectáculo de Pachacámac, no dude en hacerlo y, si es en familia o con amigos, mejor aún. Usted tendrá la oportunidad de escuchar los instrumentos de los Incas de ayer y hoy. También usted aprenderá un poco más de lo que no se dice en la historia oficial sobre los peruanos

Y, si al final del concierto usted quiere llevarse un recuerdo con los miembros del grupo, no desespere; ellos son muy accesibles y se acercan a su público. Ustedes pueden intercambiar algunas palabras, tomarse fotos con el grupo, pedirle algún autógrafo discográfico (ya tienen 3 discos: El Hombre de Lauricocha, De la Ciudad a las Huacas y Qollana). Y, si uno no puede ir a sus presentaciones, pero desea colaborar con ellos, lo puede hacer adquiriendo sus discos.

El digipack del disco Qollana. 

Muchas gracias y felicitaciones a los integrantes de Pachacámac (Hernán Caro Leopoldo, Giovanna Ramos, Alex Acuña, Manuel Nivin) por haber regalado un espectáculo digno y sofisticado.  También los agradecimientos a la Casa de la Literatura Peruana por promover cultura y conocimiento al pueblo peruano.

* Espacios o redes en el Internet para seguir la actualidad del grupo Pachacámac:
Facebook: www.facebook.com/pages/PACHACAMAC/219143588121198

Película: Libros y nubes

Un película Des livres et des nuages (Libros y nubes) de la televisión franco-alemana, Arte; emitió el domingo 3 de abril 2016 las imágenes de las comunidades de Cajamarca que tienen sus libros e intercambian entre ellas.

Resumen de Arte televisión :
En un remoto pueblo de los Andes del Perú a 4000 metros, una pequeña niña espera con impaciencia la llegada de nuevos libros. El suministro es lento y aleatorio: el bibliotecario los transporta sobre sus hombros a través de la montaña, durante largas horas de caminata ... En el Perú, las bibliotecas rurales son modestamente suministrados: Estas bibliotecas consisten en unas pocas docenas de libros que las comunidades campesinas intercambian. Leyendo, algunos aprendieron a cocinar, otros a tejer, a asociar los colores, a curarse o a defender sus derechos. Seleccionada en numerosos festivales, esta película muestra la estrecha relación entre la lectura y la práctica.

El mundo según Michel Onfray : Platón : "Nadie actúa mal voluntariamente"

Desde el 05 de diciembre 2015, en la radio francesa France Culture se viene emitiendo la emisión Le monde selon Michel Onfray (el mundo según Michel Onfray) en la cual el filósofo francés explica y analiza en menos de 5 minutos diferentes temas.
En la primera emisión, se analiza lo que Platón dijo: "Nadie es actúa mal voluntariamente". La pregunta del conductor del programa que hace a Onfray es: ¿La frase de Platón aún es exacta? 

La respuesta de Michel Onfray : "Más que nunca, yo creo que sí [...] El mal está hecho voluntariamente.  Estamos en una configuración judío-cristianismo donde nos dicen que disponemos de libre arbitro y que Adán y Eva han elegido de cometer el mal y, que justamente el pecado original procede de esa libertad, de ese libre arbitro..." Hasta que alguien dijo que eso no era así. "Nosotros no somos libres. Nosotros estamos determinados".

En este contexto, si alguien se encuentra frente a un tribunal, se debe explicar las razones por la cual ha cometido algún delito. "No se nace pedófilo, sino uno se convierte. Hay una configuración particular. Configuración de niñez, configuración sociológica, configuración psicológica, etc. Hay que explicar por qué uno se convirtió en lo que es. Y, explicar es comprender y no justificar. Yo creo que Sacrates tenía razón y que deberíamos meditar esa idea profunda", afirma Onfray.

Entonces ¿si "nadie actúa mal voluntariamente" y, cuando se ve los fenómenos de barbarie, significa que los filósofos los justificarían? "No creo que los justificaría, los explicaría", dice Onfray. Y, "sobre el concepto de barbarie tendriamos que entendernos. Los franceses también fueron barbaros. Todos los pueblos lo fueron en un determinado momento, porque ellos frecuentemente cometieron crimenes contra otros pueblos. Llamamos "barbarie lo que no es de nuestros uso" dice Montaigne".
Michel Onfray es doctor en Filosofía que enseño en la institución pública durante 20 años. Creó la Universidad Popular de Caen en 2002, la Universidad Popular del Gusto en Argentan en 2006 y la Universidad Popular del Teatro en 2013. 

Entre algunos de sus libros publicados de Michel Onfray tenemos : Le Ventre des philosophes, L’art de jouir, Les Formes du Temps, La Raison Gourmande, L’Oeil Nomade, Métaphysique des Ruines, Splendeur de la catastrophe, Les icônes païennes, Epiphanies de la séparation, Le chiffre de la peinture, Archéologie du présent, Fixer des vertiges analyse les photographies de Willy Ronis, La vitesse des simulacres, L’organe de la crainte, Cynismes, La Sculpture de Soi, Politique du rebelle, La religion du poignard, La pensée de midi,  Théorie du corps amoureux, Le souci des plaisirs, Construction d’un érotisme solaire, Féeries anatomiques, Le Traité d’athéologie, Le Désir d’être un volcan, Les vertus de la foudre, L’archipel des comètes, La lueur des orages désirés, Le magnétisme des solstices, La sagesse tragique, L’innocence du devenir, La vie de Frédéric Nietzsche, Ars Moriendi, Esthétique du pôle nord, À côté désir d’éternité, Les bûchers de Bénarès, Une Théorie du voyage, Antimanuel de philosophie, L’invention du plaisir, Célébration du génie colérique, La philosophie féroce, Trace de feux furieux, La puissance d’exister, Le songe d’Eichmann, Eloge de Charlotte Corday, L’apiculteur et les indiens. La peinture de Gérard Garouste, Le recours aux forêts. La tentation de Démocrite, Philosopher comme un chien, Le crépuscule d’une idole, Apostille au Crépuscule, La vie philosophique d’Albert Camus, Rendre la raison populaire, La raison des sortilèges,etc, etc.

Sus libros se publican más de veinte veces en edición de bolsillo, traducido al holandés, español, alemán, portugués, rumano, japonés, italiano, chino, griego, serbio, coreano, finlandés, catalán, turco, inglés, sueco, polaco, noruego, húngaro y ruso.

Libro : La tiranía de la comunicación - Ignacio Ramonet

El pequeño libro La tyrannie de la communication[1] (La tiranía de la comunicación) del periodista Ignacio Ramonet, es un libro que apareció en 1999. Este libro no solo nos habla sobre el poder que tienen algunos medios de comunicación de masa, sino sobre todo que mal informado puede estar uno si no se busca más allá de lo que nos dice la televisión y los grupos de medios de comunicación.

Informarse sigue siendo una actividad productiva, imposible de lograr sin esfuerzo, y que exige una verdadera movilización intelectual. Una actividad más noble, en la democracia, para que los ciudadanos se comprometan a dedicarle una parte de su tiempo, su dinero y atención”, escribe Ramonet.

El periodismo de revelación

En la actualidad (y desde hacía algunos años atrás) encontrar a los que ejercer la carrera de periodistas y los medios de comunicación con el rigor que requiere cada una de ellas, es cada vez más raro, “porque, después de la guerra del Golfo (1991), que había significado el triunfo y el apogeo de una información televisada fundada sobre el poder de la imagen, la prensa escrita buscó cobrarse su revancha. Ella lo obtuvo en el descubrimiento de nuevos territorios de información, que son: la vida privada de las personalidades públicas et los escándalos ligados a la corrupción y el mercantilismo. Es lo que podríamos llamar el periodismo de revelación (por oposición al periodismo de investigación).”[2]

La híper emoción

Es impresionante al nivel tan bajo como han llegado las cadenas de televisión en todo el mundo. En su gran mayoría son programas que solo buscan idiotizar a los ciudadanos (pero hubo una marcha contra este tipo de televisión en el Perú). Juegan con las emociones del público. “La híper emoción, cuanto a ella, que es la otra figura característica de la sobre-información -, siempre ha existido en los medios, pero ella permanecía la especialidad de los periodistas de una cierta prensa demagógica, que jugaba fácilmente con el sensacional, lo espectacular y el choque emocional. A la inversa, los medios de referencia apostaba por el rigor, la frialdad conceptual, y prohibían  lo más posible el pathos manteniéndose estrictamente en los hechos, en los datos, en los actos”[3]

Se le reprocha a la televisión por primera vez durante la década de los 60 y 70, principalmente de convertirse en “instrumento del poder” y de querer “manipular las mentes” para el beneficio electoral del partido dominante. “Se pensaba que controlar la televisión equivalía a controlar el sufragio universal”[4]

En la actualidad, es una realidad que si se puede controlar o canalizar el malestar de la gente a través de la televisión, eso es una forma de controlar la mente de los ciudadanos, pero para Ramonet no es así. “Desde el general Pinochet (Chile) al general Jaruzelski (Polonia), todas la dictaduras que creerían poder afrontar sin temor las urnas bajo pretexto que ellos controlaban desde años los medios, y principalmente la televisión, conocerían un fracaso humillante.

Los franquistas en España y los comunistas en Rusia, a pesar de su control absoluto de los medios durante decenios, perderán las primeras elecciones libres después de la caída de los regímenes autoritarios. Lo que muestra bien que el control de los medios y la dominación de la televisión no producen, automáticamente, el control de las mentes[5]”

Si los medios de comunicación solo queda en manos de privados, la probabilidad de emitir programas sensacionalista, exageradamente perverso, etc. es muy alto cuando no se tiene instituciones que pueden controlar o limitar el contenido de ciertos tipos de programas. “La desconfianza, esencialmente política se terminó en muchos países – en Francia, en 1982 – con el fin del control directo ejercido por los gobiernos sobre la información televisada, y con la creación de instancias de regulación del audiovisual – tales que la Alta Autoridad, la Comisión Nacional o el Consejo Superior del Audiovisual”[6]

Los medios de comunicación siempre juegan con la emociones, con la imágenes, etc. Porque así se logra romper la barrera de la resistencia del cerebro contra las “diversiones”, se busca lo irracional antes que la razón. “La prensa escrita cree entonces poder recrear la emoción experimentado por lo telespectadores publicando textos (reportajes, testimonios, confesiones) que juegan, de la misma manera que las imágenes, sobre el registro afectivo y sentimental, dirigiéndose al corazón, a la emoción y no a la razón, a la inteligencia”[7]

La única forma de ir en busca de la verdad, es confrontar informaciones de todos los medios posibles, solo así podría uno evitarse conclusiones sesgadas a la realidad. “En nuestro medio intelectual, la verdad que cuenta es la verdad mediática. ¿Cuál es esta verdad? Si, a propósito de un acontecimiento, la prensa, la radio y la televisión dicen que algo es verdad, él será establecido que eso es la verdad. Incluso si esto es falso. Como ahora es cierto lo que el conjunto de los medios de comunicación acreditan como tal.

Entonces, el solo medio del que dispone un ciudadano para verificar si una información es verdadera es confrontar los discursos de los diferentes medios de comunicación. Entonces, si ellos todos afirman la misma cosa, no hay más que admitir este discurso único….”[8]

Un genocidio ocultado

En La Tyrannie de la communication se pone como ejemplos muchos casos que resultaron completamente falsos o simplemente fue ignorado intencionalmente muchos acontecimientos que requerían una intervención rápida para evitar finales fatales,  “por ejemplo, sobre el genocidio de Ruanda en 1994, cuando los Hutus exterminarían cerca de un millón de Tutsis. Las informaciones sobre este acontecimiento fueron primero confusos porque ellas no llegaban a Francia que a inicios de mayo – las masacres habían comenzando desde el mes de abril – es decir en el momento donde todos los medios de comunicación estaban ocupados en cubrir el Festival de Cannes.  Es muy significativo, en este contexto, que estos últimos hayan consagrado más espacio a evocar este ‘gran acontecimiento” que era la película del Bernard-Henry Lévy, Bosna!, en lugar de hablar de Ruanda. Esto prueba bien que una barbarie puede ocultar otro”[9]

Falsificar y trucaje

Los espectacular siempre buscan ciertos periodistas los medios de alance a gran escala. “La búsqueda de lo sensacional a todo precio que puede conducir a aberraciones y a los “trucajes”. Y según el periodista Annik Cojean, “el trucaje en el lenguaje periodísticos, es mentir; falsificar una investigación para darle, una fuerza, un aspecto espectacular o una conclusión que podría no haber tenido, distorsionar un reportaje disfrazando ciertos elementos; presentar como la realidad una situación nacida de la imaginación del periodista, de sus supuraciones o de observaciones no verificadas.”[10]
En los medio de masa, siempre hay el trucaje y las mentiras, pero también las veces se van incrementando. Ignacio Ramonet recuerda lo que el periodista Christopher Jones había publicado en 1981 sobre la guerra de Camboya, Vietnam, Khmer Rojo en el diario del New York Times, que al final todo era falso. “Sin jamás haber viajado al lugar de los hechos, el brillante periodista los había escrito sacando de su sola imaginación, confortablemente instalado al borde de su piscina de Marbella en España”[11]

La Tiranía de la Comunicación, tiene un poder que puede hacerte creer que todo es verdad y real. “En 1982 una periodista del Washington Post, Janet Cooke fue galardonado con el premio Pulitzer por un extraordinario reportaje sobre el pequeño Jimmy, un adicto a la heroína de 8 años … que jamás existió” [12]

En casos de guerra, los grandes medios de comunicación jamás dan la oportunidad de expresarse en sus canales a los que se oponen a la guerra. ”Estos medios de comunicación pertenecen a grandes conglomerados, del cual ciertos tienen un interés en la industria de guerra. La cadena NBC es el propietario de General Electric, uno de los principales proveedores del ejército. En 1991 no fue por casualidad, NBC tenía el tono más guerrero…”[13], según la citación de una publicación del diario Le Monde.

En todo esto también esta lo que Frédéric Beigbeder describe en su novela 99 Francos, es decir la influencia de los juegan con tus deseos de manera sicológica. “Publicistas y anunciantes ejercen también sobre los medios de comunicación una influencia innegable y perverso”[14], nos dice Ramonet.

En todo esto y en plena mutación de las formas de acceder a la información y frente a tanta que llegan cada segundo, es necesario saber elegir los que de alguna manera demuestran cierta fiabilidad, credibilidad, autentico, etc. Y, para eso, se requiere un poco de trabajo, “porque querer informarse sin esfuerzo es una ilusión que cae bajo el mito de la publicista antes que la movilización cívica. Informarse cansa, y es a este precio que el ciudadano adquiere el derecho de participar inteligentemente en la vida democrática”[15]

Todos los medio se están alineando sobre una misma línea, donde solo se da en prioridad al voyerismo, al sensacionalismo, a las cosas, rápidas y divertidas. Un periodismo en el sentido digno del término casi está en extinción, artículos cortos, con títulos que llaman la atención, etc. Bajo este panorama, el autor  de este libro La Tiranía de la comunicación, escribe: “Muchos ciudadanos que no encuentran, más en sus páginas de su diario, un análisis diferente, más rebuscado; más exigente que aquella que propuesta por el noticiero televisado. Esta simplificación es tanto más paradójica ya que el nivel educativo global de nuestras sociedades no dejó de elevarse”[16].

Movilización intelectual

Al final del libro Ignacio Ramonet escribe: “Informarse sigue siendo una actividad productiva, imposible de lograr sin esfuerzo, y que exige una verdadera movilización intelectual. Una actividad más noble, en la democracia, para que los ciudadanos se comprometen a dedicarle una parte de su tiempo, su dinero y atención.”[17]

Porque informarse no es un pasatiempo inútil; "es una disciplina cívica donde el objetivo es de construir ciudadanos".

Un pequeño libro que nos ilustra muy bien cómo ha ido cambiando los diferentes medio de comunicación, sus compromisos, sus parcialidades, sus intereses camuflados, sus mentiras, sus influencias que producen, sus manipulaciones, etc.

Notas:
[1] Ignacio Ramonet, La tyrannie de la communication, éditeur Gallimard, édition augmentée, Éditions Galilée, 1999 ; 2001 pour le chapitre « Loft Story », Collection Folio/actuel N° 92, 290 pages.
[2] id. p.25
[3] id. p.35
[4] id. p.40
[5] id. p.41
[6] ibid.
[7] id. P.45
[8] id. p.81
[9] id. p. 82
[10] id. p. 116
[11] id. p.117
[12] ibid.
[13] id. p.242-243
[14] ibid.
[15] id. p. 280
[16] id. p. 281
[17] id. P.282

Libro: El Castillo de mi Madre - Marcel Pagnol (Recuerdos de Infancia – Tomo 2)

Continuando con los libros Souvenirs d’enfance (Recuerdos de infancia) de Marcel Pagnol, el segundo de ellos es Le château de ma mère (El Castillo de mi Madre) publicado en 1957.

Después de la “epopeya cinemática” contada en el primer tomo (La Gloria de mi Padre), Marcel ahora nos cuenta en este segundo tomo las acciones de buena voluntad del hombre que no siempre uno debe aceptar, sabiendo que esta acción no siempre puede ser entendido como tal, sino como un delito o falta.

Otro personaje que aparece en este libro es Lili, un niño de 8 años muy hábil en poner las trampas en el campo para atrapar a los animales. Lili conoce mejor que Marcel (9 años) la vida en el campo, Lili tiene un conocimiento de su medio, de las condiciones ambientales, de los horarios, de los lugares, de los animales, etc. Cada vez que Lili dice algo sobre sus experiencias de vida y sus técnicas de caza, Marcel se queda perplejo por su sabiduría de su nuevo y pequeño amigo.

Frente a naturaleza, el hombre de la ciudad es el salvaje nos dice Lili, porque la gente de la ciudad viene al campo no solo en excursión, sino también a robar los frutos de las plantas, ensucian las fuentes de agua. Incluso vienen a destruir o a cometer tragedias. “Evidentemente, las personas de la ciudad son peligrosas, porque ellos no saben…” dice el Padre de Marcel, a lo que Lili replica de esta manera: “Cuando no se sabe, es mejor quedarse en la casa”.

Los padres de Marcel ya habían planificado lo que harán cuando regresan a la ciudad. Marcel debe seguir el eslabón de la cadena del sistema, es decir prepararse para los exámenes, obtener sus diplomas, etc. Pero Marcel que ya había encontrado un sabor especial en el campo, a su amigo Lili le dice: “Si quieren forzarme a regresar a la ciudad, yo me dejare de morir de hambre. Por cierto, ya comencé: no comí nada esta mañana”. Esta confesión perturba a Lili, quien le ofrece algo que comer, pero Marcel no acepta. Luego él adiciona: “Mi decisión está tomada. Ellos no tienen más que irse, si eso les gusta. Yo me quedo aquí”.

 
El pequeño Marcel, decidido para quedarse, empieza a contar a Lili de cómo va vivir solo, como se alimentara, etc. en caso de quedarse en el campo. Toda una rica imaginación propia de los niños. Pero, Lili, no parecía tan convencido de lo que está diciendo, entonces Marcel un poco molesto le dice: “¡Esta claro que tu no lees jamás nada! ¡Mientras que yo, leí veintenas de libros! Y, puedo decirte que hay mucha gente que se las arregla muy bien en la selva virgen…. Y eso que, hay muchas arañas venenosas […] Mientras que aquí, no hay autóctonos, no hay animales salvajes…

Pero, el problema, según Lili era como pasar la noche. Para esto, Marcel también tiene respuesta. “Me haré una cama de baouco [hierba salvaje, ndlr], en el piso, en una esquina de la cueva. También es tan bien como un colchón….Y luego, te voy a enseñar que uno se habitúa a todo. Tu, naturalmente no conoces a Robinson Crusoé, pero yo, lo conozco muy bien…. Era un marino. Él sabía nadad como un pez, pero no sabía correr en absoluto, porque, en los barcos, no hay espacio… Y bien, cuando naufragó en una isla, al cabo de tres meses, ¡él corría tan rápido que atrapaba cabras salvajes!

¡Ho, ho!” dice Lili con fuerza, “¡a ese tipo, yo no lo conozco, pero a las cabras, los conozco! ¡Si él es el que contó eso, tu puedes estar seguro que es un buen mentiroso!

Así, otra vez se inicia otra conversación entre los dos niños.
Después, más tarde Marcel comprendió cómo había tomado tal decisión. Él dice esta magnífica frase:

Hasta la triste pubertad, el mundo de los niños no es la nuestra: ellos tienen el maravilloso don de la ubicuidad.
En otra parte de “El Castillo de mi madre”, Marcel, continuando con su plan, decide dejar una carta de despedida a su familia. En ella renunciaba a sus estudios y a todo para quedarse a vivir en el campo. La carta lo dejan en un lugar donde es fácilmente visible y, se embarca al encuentro de Lili que debe llevarme a otro lugar. Aquí inicia otra historia tierna de los dos niños.

Las vacaciones para los niños son como un regalo, sobre todo las más largas y, no las cortas por navidad. El padre de Marcel tenía que estar el lunes, porque él enseña en el colegio, eso significa regresar pronto, pero la mamá de Marcel, gracias a su relación con la esposa del Director del establecimiento, había logrado cambiar el horario a favor del padre de Marcel. Todo esto de manera secreta.

Entonces, allí nace la pregunta: ¿El papá de Marcel debía agradecer a su jefe, el Director? Si lo hace, sería reconocer que el Director cambio el horario de una institución pública para la comodidad de un profesor.

Para pasar un fin de semana en la casa de campo, cada sábado tenían que recoger más de 8 kilómetros a pie cargado de provisiones. En el camino se encontraron con Bouzigue, un responsable de la administración de los canales de agua que pasa por las propiedades privadas, entre ellas un Castillo. Bouzigue que era un ex alumno de Joseph (papá de Marcel), le dice que esta vez no harán el recorrido de siempre, sino que cruzaran las propiedades, para tal efecto él dispone de las llaves oficiales que abren las puertas.

La pregunta que Joseph le hace a Bouzigue: “¿Esto es perfectamente legal?” “Es a causa de tus funciones oficiales que tu tiene esa llave, y que tú tienes el derecho de pasar sobre los terrenos de otros. Pero, ¿Crees tú que nos está permitido seguirte?
La respuesta de Bouzigue: “¿Quién lo sabrá?
¡Ya ves! Porque tú crees que no nos verán, estas reconociendo tu culpabilidad”, dice Joseph.
¿Pero qué mal hacemos? Yo encontré mi instructor, y estoy orgulloso de mostrarle el lugar donde trabajo”, replica Bouzigue.


Entre discusiones, Joseph y su familia lograr aceptar la proposición de Bouzigue. Y, lo que pasa después, es otra historia mucho más rica, porque ya abarca otros temas sobre el comportamiento del hombre (agresión, mentira, chantaje, poder, etc.).

Esos canales, fueron de su infancia de Marcel por donde cruzaba durante sus vacaciones, después de muchos años Marcel regresó a estos lugares. “Fue entonces cuando vi a través de la valla, por encima de los plátanos lejanos que reconocí el horrible Castillo, el del miedo, el del miedo de mi madre”. 

Se los recomiendo leer este libro. Leer lo que dice el personaje Marcel, en realidad es como estar escuchando a un niño.

Libro : Marcel Pagnol, Le château de ma mèreCollection Fortunio, éditions de Fallois, 1988, París.

Libro: Cosmos de Michel Onfray

Su reciente libro Cosmos [1] del filosofo francés Michel Onfrade, de  más de 530 páginas abarca una diversidad de aspectos de la vida del hombre y de la naturaleza.

Este libro, según las declaraciones del mismo Onfray es la primera de una trilogía de Breve Enciclopedia del Mundo. Cosmos tiene 5 partes y desarrolladas cada una de ellas de manera extensa : el tiempo, la vida, el animal, el cosmos y el sublime.

En la actualidad son muy pocas las civilizaciones que aun preservan su intima relación con su medio. Y, recientemente están saliendo a la luz filósofos que están, por un lado reconociendo y respetando la cultura de otros pueblos y, por otro lado poniendo en causa este sistema de odio hacia la naturaleza (leer el libro La haine de la anture de Christian Godin).

Ignorar los ciclos de la naturaleza, no conocer los movimiento de las estaciones y vivir sólo viven en el asfalto y el hormigón de las ciudades, el acero y el cristal, nunca haber visto un prado, un campo, un sotobosque, un bosque, un bosquecillo, un viñedo, un pastizal, un río, es ya vivir en la bóveda de cemento que acogerá un día un cuerpo que no habrá conocido nada del mundo[2]”, escribe Onfray.


El filosofo cita algunos ejemplos de pueblos que viven diferentes al resto de los occidentales. Estos pueblos “son los testimonios de lo que fuimos antes de la sedentarización: viajeros, tribus en movimiento…

En la actualidad "la aparición de las máquinas para fabricar el tiempo virtual (teléfono, radio, televisión, pantallas de video) a matado ese tiempo cósmico y produce un tiempo muerto, aquel de nuestro tiempo nihilista"[3].

Cosmos es un libro que de alguna manera reivindica una religión armoniosa que existía y existe en varias partes del mundo entre los humanos y su medio donde viven.

"Porque si la naturaleza debe dar lo mejor de sí mismo; debemos invocar a los dioses, solicitarles y obtener sus favores. De ahí que la relación entre religión y agricultura, entre el honorar y cultivar, entre la invocación a los dioses y la naturaleza.
Para que la naturaleza ofrezca lo mejor de ella, el favor de los dioses importa. Orarles, es conseguir su benevolencia y su protección. Lo que, para los seres humanos, no significa nada menos que vivir, resistir a la muerte"[4].

Un libro denso donde se explica muy bien los procesos por la cual el hombre de ciertas culturas ha pasado y sigue pasando con una total indiferencia con su universo, con su entorno, con su vida, con la agricultura, con los animales, con la naturaleza, etc. Onfray nos invita a reflexionar sobre estos misterios que nos rodea, entender la sabiduría de los pueblos que agradecen a la madre tierra y a la naturaleza. No solo eso, Michel Onfray también nos habla de la vida mísera de los occidentales llenos de riqueza material, cuestiona las prácticas de las corridas de toros, los robos de las obras de arte del continente africano, del espejismo, etc. etc.

El libro termina con una conclusión de más de 24 páginas y una rica biografía al cual Onfray recurrió para argumentar las 5 partes de este voluminoso primera parte de su trilogía.
¡Un libro a leer definitivamente!

Notas:
[1] Michel Onfray, Cosmos, une ontologie matérialiste,  Édition Flammarion, 2015.
[2] id. p.31
[3] id. p. 32-33 
[4] id. p.61

Libro: Plataforma de Michel Houellebecq

Hace algunas semanas había empezado a leer la novela Plateforme[1] del escritor francés Michel Houellebecq y, a medida que iba avanzando, me interesaba más cada página. Pero la cúspide fue cuando estuve leyendo un evento descrito en esta novela, como si estuviera leyendo algún diario de la actualidad de la semana que siguieron al 13 de noviembre 2015. Usted se dará cuenta al final de esta publicación de qué evento se trata.

Cuando ya había llegado a los primeros 25 páginas del libro, tenía la sensación e que no estaba leyendo a Michel Houellebecq, sino a cualquier otro escritor (a) que no siempre genera interés y, hasta deseamos devolver el libro a la librería (me sucedió una vez con un autor, felizmente la librería me cambio con otro), pero seguí leyendo hasta que llegué a la pagina 27 y de ahí ya la historia ya toma otra dimensión.

La novela Plateforme (Plataforma) fue publicado el año 2001, pero la historia se desarrolla entre finales de los años 90 e inicios del nuevo siglo XXI. Es una novela que trata en lo esencial sobre el hombre occidental y si se quiere Michel ilustra en estas páginas el inicio de la decadencia de esta sociedad o modo de vida frívola y miserable. Todo esto lo dice a través de la comparación con otras civilizaciones que de alguna manera aun preservan sus particularidades como es la Tailandia, lugar a donde viajaron Jean-Yves, Valérie, Michel, etc. que son los personajes de Plateforme.

El personaje reflexivo de toda esta historia es Michel, un tipo que trabaja en una entidad publica francesa ligado a la Cultura, mientras los otros dos personajes trabajan para el sector privado en el rubro del turismo y hotelería.

A través Plateforme, Michel Houellebecq pone en perspectiva sociológica sobre que o que está pasando en Europa Occidental principalmente. Michel nos habla del reemplazamiento de una creencia religiosa por otra, es decir la islamización de la Francia por citar un ejemplo. Cuando Michel escucha a una Aïcha sobre la vida se sus hermanos ligados a la religión musulmana, Michel tuvo “en ese momento una visión sobre los flujos migratorios como los vasos sanguíneos que atraviesan la Europa; los musulmanes aparecen como coagulo que se reabsorben lentamente”.[2] 

Michel nos ilustra a un hombre europeo en crisis de todo tipo. “Mis sueños son mediocres. Como todos los habitantes de Europa Occidental, yo quiero viajar[3]. Pero entiéndase que viajar es diferente que hacer turismo. Y, eso es lo que quería hacer Michel. Y para eso elige el circuito “Tropic Thaï”, es decir en Tailandia.

Hacía 15 años que este libro ya había sido escrito y descrito los cambios o preferencias de la sociedad occidental que lamentablemente ha contaminado muchas partes del mundo y se está agravando por la globalización. Lo que se puede ver hoy en día en la televisión, en los medios de alcance internacional es una constato de la decadencia de occidente. Para citar solo un ejemplo-. Hoy en día prima ante todo lo visual, lo físico y no lo intelectual y, sobre esto Houellebecq escribe: “Si él [Su padre de Michel, ndlr] había realizado tanto deporte, él me había explicado una vez, era para embrutecerse, para impedirse de pensar. Él tuvo éxito: Yo estaba convencido de que había conseguido pasar por la vida sin sentir jamás de real interrogación sobre la condición humana.[4]

En otra parte del libro, Houellebecq también habla del racismo. “…Uno de los primeros efectos del viaje… consiste a reforzar o a crear los prejuicios raciales; porque ¿cómo nos imaginamos a los otros antes de conocerlos?  Como idéntico a sí mismo, no hace falta decir; es sólo poco a poco que nos damos cuenta que la realidad es ligeramente diferente. Cuando él puede, el Occidental trabaja; frecuentemente su trabajo lo aburre o lo exaspera, pero él finge estar interesado: observamos esto[5], dice Robert, unos de los personajes que se lamente que ya no puede esperar mucho en el plano sexual a sus 50 años de edad y que incluso “ya no siente deseo por una blanca” para tener sexo, por lo que prefiere hacer un turismo sexual por todo el mundo.
En la época cuando los Blancos se consideraban como superiores, el racismo no era peligroso. Para los colonos, los misioneros, los profesores laicos del siglo XIX, el Negro era un grande animal no muy malo, con las costumbres divertidas, una suerte de mono un poco más evolucionado. En el peor de los casos se le consideraba como animal de carga útil, ya capaz de efectuar labores complejas; en el mejor de los casos como un alma tosco, mal forjado, pero capaz por la educación de elevarse hasta Dios – o hasta la razón occidental…”, adiciona Robert a su discurso precedente.

Ya en otra parte del libro, Houellebecq también habla de la vida cara de los occidentales, de los consumos de droga, de la prostitución, de la contaminación sonora, del egoísmo, de la inseguridad en los lugares público. Y, sobre todo sobre este último, Michel describe una escena de horror en Platefrome. Un día él fue testigo de las ráfagas de balas en los bares, frente a la terraza una mujer blanca empieza gritar, la gente correr para buscar algún refugio, heridos tirados por todos lados, sangre que corre por el piso, etc. Hombres fuertemente armados con metralleta en mano disparan hacia las personas que estaban en los bares y restaurantes, los vasos, los utensilios vuelan en pedazos por todas partes, etc. Mientras Michel logra esconderse debajo de la mesa y a su lado otros desangrándose mientras seguían escuchando los disparos que parecían nunca terminar. “El olor de la pólvora era muy fuerte”, dice Michel. Brazos seccionados, cuerpos mutilados, órganos fuera del cuerpo, etc. ¡Una verdadera escena de horror!

Ese pasaje del libro es casi idéntico a lo que se vivirá 15 años después en la capital francesa el viernes 13 de noviembre 2015 y que justamente Michel Houellebecq salió unos días después a condenar a los que hacen posible el nacimiento de los terrorista.

Pero, eso no es todo, al parecer lo que está diciendo Michel Houellebecq en sus libros se está cumpliendo o se va a cumplir probablemente en los próximos años. En Francia y en Europa hay un reemplazamiento de la población y, frente a una o varias crisis a la vez, las tensiones se incrementan también. “Usted tiene miedo, y usted tiene razón de tener miedo. Yo preveo para los años a venir un incremento de las violencias raciales en Europa; todo esto se terminará en una guerra civil...todo esto se resolverá con Kalachnikov[6], dice uno de sus personajes de esta novela.
Extracto [6] del libro Plateforme de Michel Houellebecq.
Para terminar, esta novela es sumamente interesante no solo por su estilo de escritura de Houellebecq, sino por el tema que sigue siendo de actualidad. ¡Se los recomiendo! mis queridos lectores.

Notas:
[1] Michel Houellebecq, Plateforme, Edition Flammarion, 2001.
[2] Ibid. p.27
[3] Ibid. p.31
[4] Ibid. p.67
[5] Ibid. p.111
[6] Id. p.114.

Libro: Cambio de Palabras de César Hildebrandt

Hace un tiempo había leído el libro Cambio de Palabras[1] del periodista César Hildebrandt. Un libro que contiene más de 20 entrevistas a políticos, escritores, ex presidentes del Perú, intelectuales, diplomáticas, etc.

Por citar solo a algunos de los entrevistados por césar Hildebrandt, tenemos: Víctor Raúl Haya de la Torre, Jorge del Prado, Alfredo Bryce Echenique, Julio Cortázar, Juan Velasco Alvarado, Luis Miró Quesada de la Guerra, Armando Villanueva, Julio Cotler, Luis Alerto Sánchez, Manuel Scorza, Pablo Macera, Mario Vargas Llosa, etc.

Un libro sumamente enriquecedor a través de sus propias palabras de los entrevistados, que nos permite conocer mejor los propósitos de cada uno de ellos en sus respectivas carreras. Lejos de los clichés que la prensa en contra de  alguien, las intervenciones de los entrevistados nos permite mejor conocer ciertos aspectos de la historia social, política y económica del Perú.

Solo a modo de un pequeño extracto, a continuación voy a citar algunos pasajes de la entrevista que realizó Hildebrandt al General Juan Velasco Alvarado cuando ya había dejado la presidencia del Perú. Esa entrevista cumplirá 40 años el próximo 03 de enero 2017 desde su publicación en la revista Caretas.

"El Perú debe ser independiente y soberano"

Cuando César Hildebrandt le pregunta si Juan Velasco Alvarado había tenido tiempo para reflexionar de lo que fue su Gobierno y los objetivos que podrían ser definidos después de la revolución. La respuesta del General:

Hacer del Perú un país independiente y cambiar las estructuras para que el Perú se desarrollara con independencia, con soberanía. No un país vendido, de rodillas. ¿Cómo era aquí? ¡Aquí mandaba el embajador americano! Cuando yo era presidente, el embajador tenía que pedir audiencia y yo lo manejada a seis pasos. Yo los fregué. Y boté a la misión militar americana. Aquí había como 50 o 60 jefes americanos y el Gobierno peruano tenia que pagarles sus sueldos, el pasaje hasta para el gatito que traía la familia. Y formulaban parte de la información para la CIA. Nosotros no los necesitábamos…”[2].

"Yo sabía que en cualquier momento me botaban"

Cuando uno defiende a la mayoría oprimida, la oligarquía inepta del Perú y sus empleados suelen usar términos como rencor, odio, resentido, etc. para desacreditar a alguien que piensa de manera diferente a ellos y que podría ser una verdadera fuerza alternativa ante esta decadente "élite" de la República peruana. Lo hacen con el fin de ocultar el tema de fondo. En realidad son ellos los que odian a la mayoría, niegan el acceso a la educación, privan a la gente que demanda una formación universitaria de calidad, etc. porque saben que al dar una educación al pueblo; su dominación ilegitima tendría los días contados.

Hildebrandt pregunta: “Mucha gente considera que usted está lleno de rencor. ¿Qué piensa de eso?”

¿Rencor? ¿Contra quién? ¡Contra nadie! Yo no di ningún golpe […] Yo llevé una revolución. […]  Porque nosotros entramos de frente a actuar, a operar con velocidad. Nosotros hemos hecho cuántas cosas a una velocidad espantosa. Yo sabía que en cualquier momento me botaban. Porque aquí en el Perú fatalmente la oligarquía nunca muere…”[3]

Claro, como el mismo General lo dice, esa “oligarquía está creciendo otra vez”, porque no se ha terminado por destruirlos del todo y, porque la revolución quedó inconclusa. Inconclusa porque lo sacaron de la presidencia a Juan Velasco Alvarado.

El comunismo

Según las afirmaciones de César Hildebrandt, “algunos sectores le reprocharon  siempre” al General “que fuera amigo de los comunistas”. Evidentemente, “no sólo eso. Me han dicho que oficialicé el comunismo. Y eso es una brutalidad…”[4], dice Velasco Alvarado.

“La revolución era para todos los peruanos”

Según el Alvarado, un hombre de formación militar; hubo infiltración del comunismo en su Gobierno. Y “en cierta forma” los “combatió”, sin llegar a perseguir a alguien por sus opciones ideológicas, porque el General respetaba las ideas de todos que podrían “expresarlas” de manera libre y “como le dé la gana. A no ser que lo hagan cambiar a la fuerza, o que le hagan lavado cerebral. Uno de los puntos de nuestra revolución peruana era para todos los peruanos, no era para unos cuantos. Yo decía que a aquellos que no querían estar con la revolución, la revolución les iba entrar por los poros alguna vez”[5].

Yo no hice la revolución para llenarme los bolsillos

César vuelve a preguntar: "Libros como El Poder Invisible lo han descrito a usted como un hombre resentido, lleno de amargura por su infancia tan pobre, tan dura. ¿Qué le suscita eso?"

Hubiera sido como el alacrán, Me hubiera metido la ponzoña yo. Cuando yo hice la revolución, ya era general de división. Había llegado a lo más alto de mi carrera. General de división […] Era comandante general del Ejercito  y presidente del Comando Conjunto. ¿Dinero? Yo no necesitaba dinero, viejo. Yo había estado como agregado militar en Francia, donde gané bastantes dólares como diplomático. Después fui miembro de la Junta Interamericana  de Defensa, y ahí también gané plata. Ahorrábamos, yo nunca he sido botarate […] Yo no hice la revolución para llenarme los bolsillos. ¿Dónde está el dinero que me he robado? Yo no tengo plata. Yo vivo con las justas. Vivo de mi pensión, nada mas.”[6], dice Juan Velasco Alvarado.

Yo no era el tirano

En otra parte de la entrevista, también se habla de “los más importantes errores de su Gobierno” del general Alvarado.

“… Mi gobierno era un Gobierno de la Fuerza Armada. Yo no era, como dicen, el tirano que decía tal cosa […] Eso es falso. Yo todo lo llevaba a votación al gabinete”[7], afirma Juan Velasco Alvarado.

A la buena gente los excluyen

En plena crisis económica, la primera solución pasa por tomar medidas para solucionar el problema. Y, para eso las entidades económicas deben estar a cargo de gente capaz. Pero si se remplaza a los responsables de los puestos claves del Gobierno que sólo buscaran su beneficio personal o de una minoría, poco o nada se puede hacer para solucionar la crisis económica.

Juan Velasco Alvarado dice: “… Botan del Banco de reserva a Barreto, que es un tipo de mucha experiencia; ¿Así se hace patria? A la buena gente la han botado y ha quedado una partida de mocosos”[8].

La revolución fue para hacer un nuevo Perú

Cada acción de la revolución tenía un costo que debía ser pagado. La responsabilidad de cualquier gobierno, es buscar la mejora de vida de sus ciudadanos y de la mayoría y, para eso las obras deben ser ejecutadas. Juan Velasco Alvarado dice:

Si usted va al Gobierno y no hace nada, no gasta un centavo. La revolución fue para hacer un nuevo Perú. Había que expropiar las tierras y había que pagar esas tierras. Cada transformación costaba al país. Las cuentas están claras. Yo lo pongo el oleoducto, Poechos, Cuajones, Bayovar, Olmos, la fábrica de papel, fertilizantes. Actualmente este Gobierno va apretar el botón, a hacer inauguraciones. ¿Inauguraciones de qué? De obras importantes que hizo la revolución”[9].

La virtud y el defecto del gobierno revolucionario

Cuando César pregunta al General para que mencione algunas virtudes y defectos de su gobierno revolucionario, la respuesta del ex presidente del Perú es:

La mejor virtud fue que fue el primer Gobierno que luchó por las grandes mayorías que estaban oprimidas”[10]. Y “el peor defecto de la revolución… bueno, tenía muchos defectos. Porque yo actuaba con gente que era enemiga de la revolución. Había belaundistas, apristas, comunistas. Teníamos opositores por todos lados. Inclusive ya está usted viendo, viejo, que mis ministros me traicionaros. ¿O no? Me traicionaron porque me sacaron.”[11]

En defensa de la revolución

Hasta hoy en día se ve a los diarios demoler al General. Es lógico esa posición porque ellos eran los latifundios que tenían extensos terrenos de cultivo, conocidos como haciendas, donde se les hacia trabajar a los pobladores prácticamente sin ninguna o casi nula remuneración económica.  Hace casi un año, en un reportaje de France 2 (televisión francesa), los Quechuas afirman claramente cómo eran explotados por estos terratenientes (ver: Cita en tierra desconocida: Arthur, en la casa de los Quechuas). Ante el cambio de gobierno unos forman parte de la oposición, otros no. En el caso del Gobierno de Juan Velasco, el diario Expreso defendía la revolución.

Expreso defendía a la revolución peruana […] ¿Por qué? No sé. Pero la defendían. Cuando La prensa nos atacaba, el único que salía y nos defendía era Expreso. Cuando El Comercio nos atacaba, el único periódico que salía en defensa de la revolución era Expreso. Se les prendía como un perro y les decía pestes. Nos defendía bravamente, con valentía. Ahora yo sé que allí había comunistas, claro. Estaba Moncloa, Roncagliolo, había varios, había un grupo. Pero nos defendía…”[12]

En otra parte de la entrevista también se habla de las reuniones que tuvieron algunos mandos que traicionaron al General. También del riesgo que podría producirse en caso de que los medios de comunicación cayeran bajo las manos de los comunistas, de la extrema izquierda, etc.
La gente era estafada, le robaban su dinero

A diferencia de los que se puede escuchar y leer hoy en día en los medios controlados por una minoría  y por la oligarquía amargada y colérica a los que se enfrentó con firmeza Juan Velasco Alvarado; el libro Cambio de Palabras nos muestra un panorama mucho más interesante y, que invita a uno a investigar un poco más sobre la revolución militar de Velasco.

La única amargura que tengo es no haber completado las transformaciones. Nos falto no sólo la salud y la vivienda sino el crédito, la banca; no queríamos apoderarnos de los bancos para apoderarnos de sus utilidades. Lo que queríamos es que el estado fuera dueño de la banca para poder manejar el crédito con un criterio revolucionario. Prestarle al zapatero, al gasfitero, al campesino […] Oye, viejo, no había plata; a esta pobre gente le compraban las cosechas por cinco años; esta gente era estafada, le robaban su dinero… nos falta tiempo, porque me botaron. Yo hice lo que pude….”[13]

150 años de una oligarquía incapaz

Existe una élite que gobierna el Perú y, esta élite carece de visión, de estima, carece de empatía hacia sus compatriotas. Y, jamas harán algo por su pueblo si no se sienten como parte de ellos. Lamentablemente esa "élite" gobierna al Perú. Velasco tiene razón al decir que esos gobiernos nunca hicieron algo para cambiar la situación de los peruanos.

La revolución se ha dado el gusto de hacer las transformaciones que no hicieron los civiles. Los civiles tuvieron 150 años el Gobierno  no lo hicieron. Por eso es que la Fuerza Armada tuvo que hacer la revolución. El consuelo que tengo es que la revolución hizo vibrar. Porque hasta los enemigos nuestros vibraron de contento cuando recuperamos Talara...“[14]

En efecto, la recuperación de Talara fue un evento histórico. Recomendable este libro para todos y, no sólo para los que hacen periodismo, como dicen muchos "periodistas".

Y para conocer mejor el tema sobre el Gobierno de Velasco Alvarado, también seria bueno leer el libro “La Revolución de Velasco en cifras” de Vargas Gavilano Amilcar.

Nota:
[1] César Hildebrandt, Cambio de palabras, edición Tierra Nueva, tercera edición 2009.
[2] id. p. 99
[3] id. p. 99.
[4] id. p. 101.
[5] id. p. 101.
[6] id. p. 102.
[7] id. p. 103.
[8]id. p. 104.
[9] id. p. 104.
[10]id. p. 104.
[11] id. p. 105.
[12] id. p. 106.
[13] id. p. 107.
[14] id. p. 107.

Libro: La impostura climática de Claude Allègre (I)

A una semana (del 30 noviembre al 11 diciembre 2015  en París) para dar inicio a la COP21 (la 21 enésima Conferencia Internacional sobre el Cambio Climático, con la finalidad de tomar medidas en relación al clima), encontré el libro l’Imposture climatique ou la fausse écologie de Claude Allègre, un científico y autor de una decena de libros. Allègre es un científico de renombre, recibió en 1994 la Medalla de Oro del CNRS (Centre National de Recherce Scientifique); la distinción científica francesa más alta.
La impostura climática

En la obra L’imposture climatique ou la fausse écologie[1] (La impostura climática o la falsa ecología) es una entrevista/conversación entre Dominique de Montvalon y Claude Allègre, publicada en 2010. En este libro de pone en causa a los científicos, revistas, periodistas, medios de comunicación, instituciones internacionales, escritores sobre el clima que imponen sus “estudios científicos” para justificas la dominación de los países del Norte para prohibir el desarrollo de los países del Sur principalmente.

Entonces para hacer más claro los propósitos defendidos por Claude Allègre, citaré en esta primera parte algunos pasajes del libro con la finalidad de entender mejor el tema. 

Modelos informáticos en cuestión

Allègre afirma una verdad que muchos creen que una verdad eternal. Los modelos matemáticos están en constante mejora. Lo que antes tenía validez tiene un límite en el tiempo y ya no tendrá validez en el futuro. “Estoy convencido que, de aquí a 5 años, todas las predicciones climáticas fundadas sobre los modelos informáticos aparecerán como falsas y que otra vez se pondrá en acusación a la ciencia[2]

¿Prohibir el desarrollo de los países del sur?

Muchas conferencia terminan en fracasos uno tras el otro. Porque lo que está en juego no es solo decir dejemos de emitir CO2, sino detrás de todo esta está el control para poder o no acceder una mejor calidad de vida. Y, para llegar ahí, se requiere un avance en tecnología, uso racional de los recursos y materias primas y, para llegar allí, necesariamente se pasa por tener o explorar fuentes de energía, sin esta última nada se puede hacer. Pero los países “ricos” o del Norte, quieren impedir al acceso de una mejor vida a los pueblos de los países del Sur, al menos eso es lo que podría suceder a mediano y largo plazo.
Para obtener una respuesta positiva en el acuerdo de Copenhague, habría sido mejor “no presentar la reducción de las emisiones de CO2 como sanciones o prohibiciones para retrasar el desarrollo – sobre todo de los países del sur – pero, al contrario, como oportunidades para promover un nuevo modelo de desarrollo. La lógica de prohibiciones, de cuotas y de alquileres de carbono es retrogrado, neocolonialista y, lo vimos, ineficaz. Este alarmismo climático sobre una afirmación del aumento de 2°C o 3°C en un siglo – que se podría evitar reduciendo las emisiones de CO2 – ha puesto todo al revés.”[3]

Al menos en Copenhague se habría visto un espectáculo de batalla entre los países del Norte y los de Sur. Porque es francamente inadmisible que en nombre del calentamiento climático, los más fuertes intentan todavía seguir dando órdenes a los países soberanos del Sur.
Exactamente, un fracaso para el norte en su voluntad de controlar el desarrollo del sur. Cuando entendemos decir que la China no tiene el derecho de desarrollarse como nosotros lo habíamos hecho, que ella debe inventar un nuevo modelo de desarrollo, los chinos responden: “Es nuestro problema. Ustedes no tienen más que evitar consumir y contaminar el planeta…[4]

Cuidado con deteriorar el planeta 

Es una ambición de los países ricos que se escondieron tras mensajes alarmistas de “científicos”, medios de comunicación, líderes políticos, organizaciones internacionales para justificar acuerdos que van contra el legítimo derecho de acceso o al desarrollo de sus propios modelos socio-económico político de los países del Sur.

Cierto, pero esta ambición fue mucho tiempo escondido, en el nombre de los imperativos ecológicos planetarios, por lo nebulosa que rodea la guerra mundial anti-CO2. Se le decía a los países del sur: “cuidado, a todos nos concierne, ¡vamos a deteriorar el planeta![5].

Pretenden gobernar el mundo desde la tecno-estructura de la ONU

Otra razón por la cual Copenhague ha fracasado, es su estructura que la Organización de las Naciones Unidas (ONU). En ella están aferrados técnicos que tienen la intención de gobernar el mundo, pisoteando los procedimientos democráticos. Ante esto, Claude Allègre denuncia a los autoproclamados apoyados por la ONU que pretender tener la verdad absoluta y que se niegan a un debate libre.
¿Por qué un pequeño  grupo autoproclamado, con la hipocresía de la ONU, tendría el derecho de decir al mundo la “verdad” científica, y lo que él debe hacer en el nombre de una ciencia incierta y de una estrategia de comunicación que yo estimo deshonesto privado de debates libres?[6]

Científicos que se oponen, son desaparecidos

La deshonestidad de los “científicos” o de los portavoces es evidente, que buscaron sembrar el miedo con mensajes apocalípticos. Y Allègre lo dice claramente:

Ella es deshonesta porque ella buscó asustar – y ella lo logró – extrapolando de manera no científica las previsiones llamadas “científicos”. Y todo sin dar la palabra a los científicos que no piensan como ellos, cortándoles los créditos, e impidiéndoles de publicar sus ideas, impidiéndoles de tener acceso  a la base de datos, luego calumniándolos, afín de propagar miedo y falsas verdades…. Donde algunos son grotescas[7].

Subvención para impedir el desarrollo

Muchas organizaciones no gubernamentales (ONG) promueven actividades contra el calentamiento global. Sin embargo sus actividades en gran medida no están dirigidas directamente hacia los que llevaron a una situación de impase del cual los directos afectados son los menos favorecidos. Se utiliza argumentos para pedir ayuda cuando las Islas de Pacifico están inundadas, aduciendo que se debe al cambio climático, cuando en realidad el Mar aumenta su nivel de 2 milímetros por año. La causa de estas inundaciones es debida al fenómeno bien conocido, el Guyot. Semejante cuando nos dicen que los pobladores de Bangladesh que están amenazados por una migración de tigres a causa de la emisión de CO2, o cuando leemos en el diario Le Monde que hay que dejar de comer la carne de res porque esta malo para el clima[8].
¡Subvenciones contra la promesa de no-desarrollo!... con el miedo planetario, se esperaba que todo el mundo, de una cierta manera,  encontraría su cuenta. Pero los resultados demostraron que no es así[9].

Bonos de carbono para contaminar

Recibir subvenciones, a largo plazo es quedarse en completa desventaja. Ese modelo no va hacer más que incrementar la precariedad con los pueblos del Sur. Lo que tiene que hacerse es que cada uno debe elegir lo que mejor le conviene, tomando en cuenta diversos factores para poner acceder a otras formas de energías.
Con los bonos carbonos para contaminar, y una multiplicidad de prohibiciones -, esto no es la buena fórmula. Lo que debe primar, es la innovación y el desarrollo de nuevas fuentes de energía barata Proponiendo compartir la innovación con los países del tercer-mundo podemos salir del estancamiento de Copenhague. Reducir las emisiones de CO2 de 20% para los países industrializados, esto no quiere decir volver atrás: esto quiere decir dotarse de recursos de energías nuevas.[10]

El mito intocable

¿Para qué hoy privar el acceso a una calidad de vida mucho mejor a los pueblos del sur, en nombre del cambio climático, cuando en realidad no se conocen con exactitud el rol de otros factores ajenos al CO2? “'El calentamiento climático' es un mito intocable. ¡No importa la realidad! Ahora vivimos en el mundo cibernético, en el mundo digital, y en este planeta, la fantasía a menudo suplanta lo real, ¡demasiado banal! Dicho esto, yo advierto a los grandes sacerdotes de este cybermundo: se darán cuenta ellos que los ciudadanos empiezan a estar cansados por este catastrofismo repetitivo, por estas alarmas sucesivas – el futuro será dramático -, ¿mientras a diario viven muchas dificultades, tantos desafíos? Se les invita a luchar contra un posible y supuesto inquietante calentamiento climático: esperando, ellos mueren de frío y están sin empleo.[11]

¿No será mejor preocuparse los problemas de hoy, en lugar de lo que supuestamente va pasar (si es que sucederá, porque nadie conoce el futuro) dentro de un siglo? La gente quiere soluciones  a sus problemas de hoy y “¡no del clima dentro de un siglo![12].

El cambio climático es real, pero no solo se debe al CO2

Pero hay que remarcar que Claude Allègre no niega el cambio climático, sino que él está en contra de las tomas de decisiones en función de reportes “científicos” y “reduccionistas” donde sólo se está teniendo en cuenta las emisiones de CO2.

Hay que decir que el calentamiento climático es real y, cualquiera que sea, mañana, habrá que adaptarse. Pero no sabemos lo que será ni si las causas de este calentamiento son naturales o humanas. Desde 10 000 años, el hombre hace demostración que él se adapta a los cambios climáticos que nunca cesaron. Decidir que el CO2 es la sola e única responsable y que bastaría de reducir sus emisiones para todo resolver, esto es, por lo menos, poner todos sus huevos en la misma canasta. Hace falta una actitud más pragmática, plural diversificando las precauciones[13].

Combate contra el extremismo y totalitarismo verde

Los que están cuestionando los reportes del GIEC (Grupo Internacional para el Estudio del Clima, creado en 1988 bajo la efigie de dos organizaciones de la ONU: el programa de las naciones Unidas para el Medio Ambiente y la Organización Meteorológica Mundial), cada día van sumándose más científicos. Pero a inicios Allègre fue casi el único en denunciar las tesis del calentamiento climático.“Mi combate, es contra el extremismo bajo todas las formas, contra el alarmismo, el miedo, el totalitarismo verde, contra los excesos de todos los orígenes. Mi combate, es aquel del buen sentido y de la mesura.[14].

Los hechos observados y si los modelos no van con la realidad

El invierno 2008-2009, habría sido el más frio y desde el inicio, el invierno 209-2010, no dio credibilidad a la ida de un calentamiento del planeta. Por lo que la realidad que uno tiene frente a los ojos, no coincide con las modelizaciones.

Desde hace diez años – y no solamente estos últimos meses – el clima no da poca razón a las predicciones alarmistas de los expertos del GIEG. El invierno 2008-2009 fue, como el precedente, frio en Francia, en Canadá, en Siberia. […] La temperatura media del océano no aumenta después 2003. Desde 10 años, la temperatura media del globo tiene la tendencia a disminuir. Y cuando vemos en pleno verano,  como sucedió en 2008, los elefantes se atascaban en la nieve en Kenia, mucha gente de buena fe se cuestionaba: ¡esto es un poco desordenado como índice del calentamiento! El GIEC debería decidirse a tener en cuenta los hechos observados y si los modelos no van con la realidad, el GIEC debe tener la honestidad de admitirlo”.[15]

Enfriamiento y calentamiento del clima

En el diario Le Monde, el 21 de octubre 2009, según menciona Allègre, “un miembro eminente del núcleo duro del GIEC, Mojiv Latif, que dirige un equipo de modelizadores localizado en Kiel en Alemania, realizó una conferencia. Primero él dijo:'Las observaciones no corresponden a las modelos. Por lo que hay que modificar los modelos'. Se trata, de su parte, de una actitud honesta e incluso valiente. Luego el adiciona: “Según mi nuevo modelo, el globo va enfriarse durante veinte o treinta años”. Predicción muy interesante fundada sobre un modelo de análisis del clima en la cual, esto es el hecho importante, el océano está plenamente integrado. Ahora bien, esta predicción adhiere a aquello de los especialistas del Sol, y principalmente de un grupo de astrónomos holandeses: sur la bases de los ciclos solares, ellos afirman, también, que habrá un enfriamiento.”[16]

El clima es impredecible

Con las afirmaciones del científico francés, lo que se busca no es ganar alguna portada, sino simplemente denunciar las imposturas del GIEC sobre todo.

Yo no busco ninguna gloria científica en este dominio. Yo noto simplemente que etas nuevas predicciones están en total contracción con los modelos del GIEC, de donde yo no dejo de denunciar la impostura ligado a la subestimación grave de incertitudes.[17].  Para Claude Allègre no se puede anticipar lo que seria en un futuro, razón por la cual toma con cautela ciertos pronósticos.“En efecto, soy muy receloso frente a todas las predicciones climáticas…. Fundamentalmente, yo creo que el clima es impredecible. Hay que observar, extrapolarlo un poco, adaptarse progresivamente[18].

El cambio climático no se debe a especulaciones teóricas

Como lo dijo anteriormente el mismo Allègre, él es consciente que existe un cambio climático, pero insiste en que esto siempre sucedió a través de la historia se puede corroborar y que las causas precisas aun quedan por conocerse:

Por supuesto, pero cela reporta de la observación, ¡no de la especulaciones teóricas! Los contrastes climáticos – extremas sequías-lluvias diluvianas, por ejemplo – parecen multiplicarse. Hay un cambio climático, como nunca dejo de haberlo  a lo largo de la historia geológica. Persisto: no se conoce las causas exactas de este cambio y, en el estado actual de la cosas, no se puede prever exactamente la evolución, ¡ni intervenir eficazmente para cambiarlo![19].
El aumento de CO2 es también por la actividad del hombre

Claude Allègre no niega que el contenido en gaz carbónico aumenta en la atmósfera después de la era industrial, porque “esto es una hecho de observación. Esto es una evidencia. Son mis colegas geoquímico, Hans Suess y Charles Keeling, que lo demostraron[20]. Allègre también admite que el aumento de CO2 es debido a las actividades humanas. “Por supuesto… esto está establecido por diversos observación geoquímicas, principalmente sobre el carbono 14[21].

Otra verdad es que el fenómeno físico del efecto invernadero causado por el CO2, “¡pero cuidado a las deducciones que algunos hacen a partir de esta constatación, teniendo en cuenta los bajos contenidos en CO2 en la atmósfera terrestre![22]

Compuesto que contribuyen al efecto invernadero

También no se debe ignorar lo que la vida cotidiana del hombre contribuye a la degradación de la Tierra, pero no en la misma proporción de los otros compuestos presente en la atmósfera. “Por supuesto que el hombre contamina la atmósfera y le impone bastante basura, principalmente en las ciudades, pero ¿Cuáles son aquellas que intervienen sobre el clima? El vapor de agua es un gas del efecto invernadero mucho más eficaz sobre la tierra que el CO2.”[23] 

En el cambio climático hay muchos factores que entran en juego: el rolo cuantitativo de las plantas verdes que absorben el CO2 para fabricar materia viviente por la fotosíntesis, el rol del océano que es un inmenso reservorio de CO2, el rol de las nubes… Existen estudios sobre la absorción de CO2 por ejemplo el del bosque africano. Según Allègre, este estudio “demuestra que la absorción por el bosque aumenta al mismo tiempo que el contenido en la atmósfera[24]. Esto es “una observación fundamental, porque podríamos pensar que la absorción de CO2 por las plantas juega el rol de un regulador natural de CO2. Se conoce, en efecto, que en el curso de los tiempos geológicos los contenidos de CO2 de la atmósfera han variado: ellos eran muchos más importantes en el cretáceo (hace 100 millones de año) que hoy en día, y después, estos contenidos han disminuido. Por lo tanto hay un mecanismo natural que regula los contenidos en CO2 de la atmósfera…. Yo insisto y soy extremadamente serio: estos fenómenos son muy, muy complejos…[25]

La ciencia no es cuestión de democracia

Enfrentarse a miles de científicos para defender una idea o simplemente para poner en tela de juicio lo que la mayoría dice, requiere una valentía y dejarse llevar por el buen sentido y la observación. Se utiliza los argumentos de autoridad contra Claude Allègre. El ejército de cerebros del GIEC comprende miles de científico. Entonces muchos se preguntan por qué un tal Claude Allègre tendría la razón.
Para eso, el científico francés tiene una respuesta contundente : Porque “la ciencia no es cuestión de democracia, no es una cuestión de mayoría. Como lo dice nuestro gran matemático Alain Connes: ‘Jamás hemos demostrado un teorema por un voto’. Un progreso científico se hace generalmente contra la opinión promedio de la comunidad. Si no, esto no es un descubrimiento. Si, en mi vida científica, he podido aportar un cierto número de ideas que son hoy en día integrados en el saber, es oponiéndome cada vez al consenso del ambiente de mis colegas. ¡En 1970, éramos tres en Francia en defender las placas tectónicas contra…. 5 000 adversarios! La aceptación de una idea científica se hace siempre al final de plazo más o menos larga[26]. Porque “para una teoría como la relatividad especial que se demuestra matemáticamente, tuvo que pasar 30 años.”[27]


Si piensas diferente, te desaparecen

En esta lucha de confrontación de estudios, cada vez más hay más científicos que están cuestionando los reportes del GIEC y, Claude Allègre dice: “Efectivamente, no estoy solo ni tampoco soy el primero en contestar el punto de vista del GIEC. Simplemente, durante mucho tiempo, las voces de los oponentes a las tesis oficiales fueron asfixiadas. En mi caso –teniendo en cuenta de lo que soy, de mi independencia -, la “mayoría climática” no tuvo los medios de impedirme de expresarme.[28]

No es una tesis, esto está demostrado

Pero se podría hacer un paralelo entre lo que el Cardenal Robert Berllarmin decía a Galileo en 1615, porque la “tesis” que Allègre defiende en este asunto del calentamiento climático, como en el tiempo de Galileo, una “verdad oficial”; dice Dominique Montvalon. A lo que Allègre replica: “No es una tesis, esto está demostrado. Existe una verdad impuesta con los métodos dignos de regímenes totalitarios. Si no, ¿Cómo comprender la violencia de los ataques de cual he sido objeto en la prensa, mientras que mi solo perjuicio era – y permanece – de poner en duda una afirmación científica? ¿La duda metódica, no es un ilustre francés – René descartes – que lo inventó? ¿Debemos en Francia ser condenados por eso?[29].

Los injurias por parte de los grandes "sacerdotes" del cambio climático

Los ataques que recibe Allègre y, los que encontraron deficiencias o exageraciones en los estudios publicados por el GIEC fueron de todo tipo. Razón por la cual Allègre en este libro habla de manera exhaustiva. “No hablo hoy en día a la ligera de 'impostura climática'. Cada vez que los espíritus independientes y teniendo una formación científica solidad – que ellos sean físicos, geofísicos, ingenieros o incluso climatólogo – examinaron el expediente del “calentamiento climático”, ellos han emitido muchas dudas, o rechazaron las tesis alarmistas del GIEC. Todos subrayaron la enorme margen de incertidumbre que hacía falta asociar a los resultados, y también un cierto número de errores técnicos. Cada vez ellos fueron inmediatamente atacados, calumniados, injuriados por las 'grandes sacerdotes del calentamiento' sin que estos últimos argumenten. Habrá que demandarse por qué pues esta postura es, a mi conocimiento, única en la ciencia moderna. En general, en ciencia, se debate intercambiando argumentos contradictorios y, en general, la ciencia es la que gana. Aquí no hay debates: '¡circula, no hay nada que ver!' El GIEC estableció la verdad. Hay un consenso. Usted no tiene más que admitirlo. Un punto, eso es todo [….] rechazar el debate, ¡es salir de la ciencia! Y eso es lo que se hace desde hace diez años[30].

Ecología política totalitaria

Es una evidencia que cuando se quiere imponer algo, se busca a los portavoces y acudir a la autoridad para justificar sus intenciones y, para eso existen miles de ejemplos. Entonces “¿Existe una interferencia entre ciencia y política?”, cuestiona Montvalon.

La respuesta de Allègre es: “Si, sin duda, pero es mucho más complicado que eso. Yo sostengo que la tendencia profunda de la ecología política es de ser totalitaria[31].
Esta es una parte de lo que contiene el libro La impostura climática, por lo que está en cada uno continuar con la investigación con la finalidad de tener e lo posible la más amplia información sobre el tema. Es crucial cuestionarse toda la vida posible y no solo admitir como verdad absoluta la información de un solo lado.

En la próxima publicación citaré nombres de personajes y científicos, partidos políticos, lo que se está haciendo para modificar el comportamiento del clima, etc.
 
Notas:

[1] Claude Allègre avec Dominique de Montvalon, L’imposture climatique, ou la fausse écologie, édition Plon, 2010, France.
[2] id. p.12
[3] id. p.12-13
[4] id. p.13
[5] id. p.13
[6] id. p.14
[7] id. p.14
[8] id. p.14-15
[9] id. p.15
[10] id. p.15-16
[11] id. p.16
[12] id. p.16
[13] id. p.17
[14] id. p.17
[15] id. p.17-18
[16] id. p.19
[17] id. p.19
[18] id. p.20
[19] id. p.20
[20] id. p.20
[21] id. p.20
[22] id. p.21
[23] id. p.22
[24] id. p.22
[25] id. p.23
[26] id. p.24
[27] id. p.25
[28] id. p.25
[29] id. p.25
[30] id. p.26
[31] id. p.26