Libro: Comprender la globalización en 10 lecciones de Gilles Ardinat

En la actualidad, un fenómeno o proceso social omnipresente se viene constatando a nivel político, económico, financiero, histórico, sociológico, geográfico, etc. Este fenómeno es la globalización. Sin embargo, no todos comprendemos como se está desarrollando este gigantesco "plan" multidireccional.

El pequeño y muy ilustrador libro, Comprendre la mondialisation en 10 leçons (Comprender la globalización en 10 lecciones) del profesor y doctor en geografía Gilles Ardinat, nos presenta lecciones cortas y claras para comprender la globalización, apoyadas de extractos de textos de científicos, periodistas, organizaciones, etc. Que también evoca los orígenes históricos de este fenómeno.

Antes de explorar el libro, el profesor se interesó de manera muy bien documentada precisar muchos términos (globalización, soberanistas, alter mundialistas, etc.). El autor también abarca otros aspectos que no siempre son tomados en cuenta en la mayoría de los libros sobre este tema.

Antes de comenzar a ver cada lección del libro, quiero precisar que en francés el termino mondialisation (designa una nueva fase en la integración planetaria de fenómenos económicos, financieros, ecológicos y culturales) es usado para hablar de globalización y no de mundialización.

Lección 1: ¿Qué es la globalización?


La globalización, donde la definición es a veces imprecisa; es abusivamente asimilada a la hegemonía occidental (esencialmente estadounidense) y al triunfo de un modelo económico particular (neoliberalismo). Por otro lado la globalización es acusado de ser el responsable de los principales problemas del planeta (desigualdades sociales, crisis, degradación del medio ambiente...), sin que sólidos argumentos vienen a sostener estas críticas (p.9).

El doctor, Gilles Ardinat, quien dice que contrariamente a los mitos, "la globalización no es exclusivamente un fenómeno económico, sino más bien un proceso geográfico" que lo describe como la "emergencia de un espacio a escala planetaria", que es "muy dependiente de las condiciones técnicas, principalmente de los transportes".

Es justamente la lecciones 9 y 10 que me motivaron a leer este libro (las otras no dejan de ser interesantes), cuando escuché a Gilles Ardinat en un video (ver video en francés, en la parte inferior) sobre la globalización ecológica.

Ardinat, cita la definición de J. Lévy para definir la globalización: "la invención de un espacio de escala mundial a partir de espacios pre-existentes de escala inferior [...] La globalización es una realidad fundamentalmente geográfico [...] es el procesos de emergencia de un espacio".

En efecto, entre ventajas e inconvenientes, la globalización está rompiendo las barreras ente los países, e incluso entre continentes. Algunos sostienen que la solidaridad se ve en aumento, lo cual sería paradoxal, porque esta globalización tiene como motor el neoliberalismo, que es principalmente individualista.
Como lo recuerda el economista Guy Garron de la Carrière, "la globalización expresa el estado de desarrollo planetario sin barrera donde todo está cerca, accesible, donde todo se comunica; por consecuencia, las solidaridades y las interdependencias se incrementan. Es el estado de nuestro mundo tal como se forma después de 1970 y sobre todo en 1980"(p.11).
Muchos autores, siempre reducen todo este cambio social planetario sólo al aspecto económico – capitalista.
Para el geógrafo Laurent Carroué se trata del "proceso histórico de extensión progresiva del sistema capitalista en el espacio geográfico mundial". El sociólogo Pierre Veltz evoca "la extensión de manera tendencial planetaria de interdependencias económicas" (p.12).
Hablar de neocapitalismo, no es lo mismo a globalización, sino que es una forma de capitalismo.
"Globalización" es frecuentemente asociado, incluso confundido con otros términos. Por lo que es necesario recordar la definición de palabras claves que son muy frecuentes mezclados. [...] Existe un vínculo entre globalización y capitalismo económico fundado sobre la propiedad privada de los medio de producción. Este modo de apropiación se opone particularmente al comunismo que generaliza la propiedad colectiva de sus medios de producción. Sobre el plano social, el capitalismo se caracteriza por la utilización del salariado (en el seno de las empresas, el patrón paga un salario a los empleados). Esta relación en el trabajo es diferente en los sistemas feudales o esclavistas. En suma, el capitalismo es un sistema económico y social; no es sinónimo de globalización, porque puede existir en teoría formas autarquías de capitalismo. Esta hoy en día bajo una forma liberal que el capitalismo tiende a globalizarse"(p.17-18)
Continuando con las citaciones del libro, ¿Desde cuàndo se vienen dando este proceso? Para responder nos dirigimos a la siguiente lección.

Lección 2: ¿La globalización es un proceso reciente?

La globalización no es un fenómeno reciente, sino todo lo contrario, hasta se puede remontar a la prehistoria (migración del Homo sapiens) (p.25). Y, en el transcurso del tiempo, lo que siempre contribuyó al movimiento fueron los grandes descubrimientos o invasiones (continente americano), los grandes viajes a través de otros continentes. En cada una de ellas la intensidad de la globalización es diferente.

Algunos imperios se construyeron a diferentes escalas, pero nunca llegaron a ocupar o posicionarse al mismo tiempo en varios continentes.
De hecho, hablar de "potencia mundial", es anacrónico tanto que la llamada potencia no tomó conocimiento del conjunto del globo (p.27).
La globalización, no es ajeno a las crisis políticas-económicas y financieras, sino todo lo contrario tiene un efecto devastador incluso cuando el epicentro esta en otro lado del mundo. Ante este problema, muchos países evalúan o toman medidas regionales o individuales.
Esta gran recesión [crisis financiera de 1929] es el arquetipo de las crisis de la globalización liberal. Ella demuestra que la globalización, lejos de constituir un proceso natural, es reversible. Frente a la debacle general, los Estados, incluso aquellos reputados liberales (Reino Unido, Estados Unidos) optan por un cierto nacionalismo económico (devaluación monetaria, proteccionismo...) (p.34).
Después de que la URSS desaparició, quien era el otro que le hacia frente al capitalismo, nacen otras ideas más liberales, para ver esto de más cerca,  ver la lección siguiente.

Lección 3: ¿La globalización es necesariamente liberal?
El liberalismo económico vuelve a salir fuertemente descreditado de la crisis de 1929. Luego de un periodo de purgatorio durante los "Treinta Gloriosos" (1945-1975), las ideas liberales vuelven a emerger a inicios de los años 1980 (neoliberalismo), principalmente en  los países anglosajones. El hundimiento del modelo soviético, que constituía hasta entonces una alternativa a la globalización capitalista, favorece el renacimiento mundial de las ideas liberales, en el contexto del "Consenso de Washington" (p.39).
Después de que la URSS desapareciera, el sistema capitalista quedo solo en la pista de competencia. Luego de la depresión de los años 30 provocan el crecimiento de los nacionalismos estáticos, produciéndose un fraccionamiento de los mercados – el gran retorno del proteccionismo.
En suma, el neoliberalismo, sinónimo de libre cambio integral, de financiarización y de privatización, progresivamente sustituido a los modelos capitalistas administrado y comunista que dominaron el periodo de la guerra fría. Esta orientación de la mundialización es indisociable de la política de los Estados Unidos (p.47).
La tendencia de la globalización no siempre fue lineal, sino todo lo contrario, experimentó diferentes tipos de crisis a lo largo de los años con efectos globales.
La coincidencia de las dificultades militares y económicas de los Estados Unidos puede ser percibida como el signo de una decadencia global de Occidente. En efecto, a pesar de algunos éxitos, la globalización neoliberal parece haber entrado en una crisis durable, cuestionando la credibilidad de este modelo. Más, las principales crisis recientes de la economía mundial tienen como epicentro los Estados Unidos: el e-krach (hundimiento de los valores ligados a Internet en el 2000), la crisis de los suprimes (explosión de la burbuja inmobiliaria y bolsa de valores en el 2007) o la quiebra del banco Lehman Brothers en el 2008) demuestran la inestabilidad del modelo anglosajón. Todos estos eventos, primero localizados sobre el territorio estadounidense, tuvieron un impacto planetario, lo que demuestra la real globalización de la economía (p.49).
Ante esta crisis del neoliberalismo, las economías emergentes son las que mejor están para hacer frente o minimizar los efectos nocivos del sistema dominante.
De un cierto modo, los "emergentes", rechazando el neoliberalismo, permitieron contener la crisis mundial. El éxito reciente del BRIC, combinado a la crisis del modelo estadounidense, constituye un contexto favorable para cuestionar el neo-liberalismo (p.50).
Esta globalización, en términos económicos fomenta la desigualdad que pueden y lo están conduciendo a posibles conflictos.

Lección 4: ¿Cuáles son las principales potencias mundiales?
La globalización no es un proceso fundado sobre la equidad, la cooperación y la repartición. Todo lo contrario, muchos autores estiman que el evento de un espacio mundial unificado conduce a nuevas formas de rivalidades. [...] Si la geopolítica puede ser definida como el "análisis de las rivalidades de poder por los territorios" (Yves Lacoste), la geo-economía estudiado  según Luttwak "la lógica conflictivo, traducido en términos comerciales"; así, la globalización lleva a diferentes potencias a competir sobre el plano económico". La economía no es aquí que una herramienta al servicio de las ambiciones políticas y diplomáticas... (p.61).
Después del 2005 la compra y venta de terrenos agrícolas por sociedades transnacionales se van incrementando para asegurar sus necesidades alimenticias, también están los controles o accesos a la materia prima por parte de naciones de gran potencia y muchas de ellas extraen sin respetar las leyes socio-medioambientales.
Las materias primas estratégicas son también determinantes. Así, en el dominio de las "tierras raras" (metales indispensables en ciertas industrias de punta), la China ha eliminado a sus competencias y se adjudicó un monopolio mundial. La Rusia utiliza su influencia en el sector gas para ejercer presiones políticas. El acaparamiento de tierras agrícolas se convirtió recientemente un asunto geo-económico mayor (búsqueda de la soberanía alimentaria). Sin embargo, en todos estos procesos, las potencias tradicionales están cada vez más desafiadas por los países emergentes. La competencia geoeconómica a la escala mundial permite a los nuevos actores de afirmarse. El BRIC es cada vez más activo. En varios dominios la hegemonía occidental es largamente cuestionada (p.63).
En cuanto al efecto de la globalización sobre las culturas de las sociedades, también tiene un efecto inesperado, tal como podemos constatar en la siguiente lección. 

Lección 5: ¿La globalización conduce a la uniformización de las culturas?
La globalización es muy frecuentemente asociada a la uniformización y a la americanización [en lugar de americanización, se debe decir estadounidense, ndlr] de las culturas. En suma, la cultura de los Estados Unidos remplazaría a los otros, lo que disminuiría el patrimonio mundial. Sin embargo, las migraciones mundiales parecen al contrario contribuir una cierta diversidad (concepto de multiculturalismo). Mientras que muchos actores exigen la instauración de una " excepción cultural", al parecer la dominación de productos estadounidenses (principalmente las películas y las series televisadas), una verdadera herramienta de la potencia política ("soft power"), no es ni automática, ni garantizado por la globalización. En un mundo donde muchos países aspiran a la potencia, la cultura es un asunto no solamente económico, sino sobre todo simbólico y geográfico (p.73).
Un efecto inverso se viene constatando en todos lados del mundo sobre el reencuentro y el reforzamiento de las culturas antes ignoradas. Una clara paradoja ante la cultura promovida por la globalización.

Si la cultura la definimos como el conjunto de comportamientos o hábitos de una sociedad transmitidos a las generaciones nuevas por medio de la educación, entonces es necesario recuperar estas auténticas formas de vida basado en la solidaridad, la reciprocidad, etc. a diferencia de la globalización, que busca destruir estas culturas de los pueblos autóctonos.
La cultura depende por consecuencia de una herencia social y no genética. Así, las costumbres, hábitos de una sociedad, la religión, la moral, el arte o la lengua son aspectos de la cultura (p.74).
Si la cultura debe ser compartida, siempre en cuando no exista una imposición. Es necesario tener claro el respeto a las otras culturas y no intentar socavar en nombre de lo universal.
La globalización, porque ella permite la emergencia de un espacio de transacción planetaria, tiene enormes consecuencias sur las culturas. La UNESCO indica a este tema que "la globalización engendró nuevas formas de intercambio et de comprensión mutuo pero igualmente favoreció la emergencia o la reemergencia de preocupantes formas de ignorancia en un contexto nuevo. En el trascurso de la última década, el mundo experimenta nuevas formas de guerras y de conflictos y estuvo confrontado a amenazas radicalmente diferentes". Considerando que la cultura debe ser compartido a la escala planetaria, la UNESCO favoreció la aparición del concepto de "patrimonio mundial". Esta idea sobreentendido que la cultura no es exclusiva a un grupo sino universal (p.75).
La cultura, así como la lengua jamás son exclusivas, uno tranquilamente puede aperturarse a otras culturas sin descuidar lo suyo, más al contrario uno llega a reforzar y a diferenciar mejor su cultura siempre en cuando uno conoce mínimamente sus origines.

Por otro lado el intercambio generalizado entre las diferentes culturas es facilitado por las migraciones internacionales que permiten conocer nuevas culturas, sin tener que clasificarlos en viveles como lo hicieron muchos intelectuales tratando de justificar la supremacía los unos contra los otros. Simplemente, una cultura es intrínseca en cierta manera a cada sociedad.
Así, la Europa fue durante muchos siglos un espacio de emigración masiva, principalmente a destinos del continente americano. Muchas decenas de millones de europeos colonizaron otros continentes. La trata de esclavos, fue un ejemplo de la globalización de intercambios, condujo a millones de africanos a ser implantar en Brasil, en los Estados Unidos o en las Antillas.
[...]
El multiculturalismo es una manifestación mayor de la globalización. Es sostenido por la UNESCO y la mayoría de las grandes organizaciones intergubernamentales en el nombre de la tolerancia y de la diversidad cultural (p.76).
La UNESCO bajo esos argumentos también se equivoca, porque en estos momentos la Francia y la Inglaterra están poblados por inmigrantes y no existe una verdadera tolerancia, más al contrario, hay motivado la formación de grupos minoritarios y radicales que no respetan al país que los acoge. Todo esto es un campo complejo que debe ser muy bien analizado bajo todos los ángulos posibles.

Este multiculturalismo es muy criticado, porque se dice que esta teniendo  efectos contraproducentes  y son acusados de motivar el "comunitarismo y la división de las naciones", antes de apostar la integracion, prefieren hablar de asimilación, con el riesgo de producir un conflicto entre comunidades.

De todo esto, en nombre de la tolerancia y del multiculturalismo, el único que se beneficia son los que están buscando hacer homogéneo una sociedad basado en el consumo y lo superfluo.
En suma, los Estados Unidos, benefician de un verdadero efecto de atracción. Sus productos culturales constituyen una comunicación planetaria en favor de la American way of life [modo de vida estadounidense, ndlr] y de su modelo democrático. Esta difusión mundial de la cultura estadounidense, favorecido por la influencia creciente del inglés, es un verdadero triunfo político: permite promover una visión del hombre, de la sociedad y de la historia generalmente favorable a los intereses estadounidenses [...] Ninguna otra potencia no dispones de un tal poder de atracción. En ese sentido, la cultura estadounidense, presentado mundialmente bajo un día positivo, se convierte en una nueva forma de propaganda, fundada sobre la seducción. El politólogo estadounidense Joseph Nye calificó de "soft power" (poder dulce) esta fuerza de atracción y de seducción (p.80).
Efectivamente, existen expertos que confirman lo mencionado antes. Pero tambien hay quienes constatan lo inverso, es decir la afirmación de ciertas culturas que siglos y/o décadas no tenían espacios de difusión.
Para ciertos observadores, la globalización no conduce de ningún modo a la uniformización de las culturas, sino al contrario a su afirmación (p.80).
Esta tesis fue defendida por el profesor universitario Samuel Huntington, así lo dice Gilles Ardinat.
La globalización, porque ella pone en relación civilizaciones diferentes, conduce a una toma de conciencia de identidad. En reacción a la intrusión de culturas diferentes, los pueblos reaccionan. El mundo es, y reside, "multicivilizacional". Nuestra época conoce un fenómeno de "indigenización", que Huntington define como el renacimiento de las civilizaciones no occidentales, en oposición a los siglos de imperialismo europeo luego estadounidense. El renacimiento de culturas autóctonas de América ilustra esta tendencia. Samuel Huntington minimiza entonces la influencia real de los valores occidentales sobre el mundo (p.81).
Utilizar las herramientas y tecnologías venidas de otro lado no siempre quiere decir que ya eres o adoptaste la forma de vida de ellas.
"La occidentalización es superficial", incluso ilusorio porque confunde  con la "modernización", es decir la llegada a todo el mundo las nuevas tecnologías inventadas por el Occidente, pero que estas tecnologías venidas del extranjero no siempre significan que un país adhiere a sus valores morales y políticas. En otras palabras la "globalización" no es sinónimo de aculturación (p.81).
Ante todo esto, la religión también juega un rol importante en la globalización, la lección 6 nos habla de esto.

Lección 6: ¿Cómo reaccionan las religiones frente a la globalización?

Las religiones monoteístas (Judío, Islámica y Católica) tienen incompatibilidades o formas diferentes de visión de mundo, por lo que es un impedimento para los planes globalizadoras.
Este proyecto consumista valorizando los derechos individuales es la esencia misma de la, globalización contemporánea. Este ideal se volvió, luego del fracaso de la experiencia comunista, la sola gran tentativa de unificación del mundo sobre la base no religiosa. La democracia universal intenta concretizar la unidad que las religiones abrahamicas anuncian desde hace siglos (p.97).
Frente a todo esto, las leyes de una Nación tienen que seguir evolucionando, sin tener que ceder a otras supranacionales para reglamentar la globalización; la lección 7 no habla de esto.

Lección 7: ¿Cómo reglamentar la globalización?
Frente a estos desordene, muchos avanzan la idea de una gobernanza supranacional, es decir superior a los Estados - Naciones. En este caso, los Estados transfieren una parte de su soberanía a una organización jurídicamente superior. A la escala regional, la Unión Europea exigió de tal transferencia a sus 27 países miembros. La supranacionalidad es presentada como un medio de unir la humanidad de manera eficaz (p.113).
Un gobierno supranacional, despoja la soberanía y la democracias de un pueblo. Las consecuencia, en el caso de la Union Europea, ya se puede constatar, por ejemplo en Francia, el ciudadano común ya no es escuchado, no tiene ningún poder o mecanismo para ejercer presión y demandar que sus derechos sean respetados. En la actualidad, es en Bruselas donde se toman las decisiones sobre que leyes aplicar a los franceses o a los países miembros de la Unión Europea. Y, en Bruselas no están los que fueron elegidos por el pueblo, sino impuestos por los representantes de las grandes compañías industriales y financieras.
La noción de "comunidad internacional" es contestable. Este término designa en realidad una coalición de Estados potentes (federado por los Estados Unidos) y no el conjunto de la humanidad (p.115).
Lección 8: ¿La globalización amenaza la existencia de los territorios?

La globalización desarrolla mecanismos, términos y crea organizaciones “independientes” (por ejemplo las agencias de notación) que dan cifras para clasificar o calificar a un país el nivel de riesgo de inversión.
La globalización contemporánea pone en competición los sistemas sociales, fiscales, jurídicos y productivos. El conjunto de parámetros económicas y sociales que caracterizan una sociedad parece debe conformarse a esta nueva exigencia. La noción de competitividad, aplicado a los territorios, fue difundido mundialmente por el economista estadounidense Michel Porter (p.129).
Todas las cifras verificables, nos muestran que la globalización induce a la jerarquización.
Lejos de corresponder a una "globalización feliz"(Alain Minc), el neoliberalismo es, del punto de vista geográfico, un sistema profundamente jerárquico: los territorios no son iguales frente a la globalización (p.130).
La competición generalizada entre territorios consagra una visión mercantil y discriminante del espacio mundial. Bien que dominante en el discurso público, esta concepción es extremadamente controversial, porque la idea de competitividad, inicialmente concebido para las empresas o productos, parece a veces mal adaptado para hablar de una nación o de una ciudad (p.133).
Todas estas medidas están hechas para satanizar los recursos del Estado y motivar el despojo de sus recursos con el argumento de la competitividad.
..La competitividad es invocada para justificar las medidas impopulares; bloqueo de salarios, baja de prestaciones sociales, cuestionar las diversas ventajas, aligeramiento del derecho en favor de las empresas...El argumento de la competitividad nacional da una excusa irrefutable para los hombres políticos (p.133).
Lección 9: ¿La globalización  qué lugar da a los cuestiones ecológicos?
En cuanto a la ecología, aquí también existe un problema para hacer frente a los problemas del cambio climático.
La ecología se volvió en un tema de predilección de la gobernanza mundial. De hecho muchos problemas medioambientales ignoran las fronteras políticas (fenómenos climáticos, nubes tóxicos, migraciones de aves,...). La nebulosa ecologista, profundamente dividido, es hoy en día dominado por un visión (alter) mundialista y progresista. Sin embargo, esta colusión ente ecología, globalismo y progresismo es una paradoja a los ojos de la historia.

En efecto, la defensa del medio ambiente encuentra sus raíces en el derecho tradicionalista y nacionalista. Los medios conservadores siempre valorizaron el modo de vida rural, opuesto a los excesos de la revolución industrial. La defensa de los animales o la sacralización del vínculo hombre/región permanece hasta los años 1960-1970, un tema muy jerarquizado sobre el plano político (p.140).
No hay otro sistema más irrespetuoso del medio ambiente que la globalización en su versión neoliberal.
La globalización neoliberal se opone a los objetivos del desarrollo durable. En efecto, la integración planetaria es portadora de riesgos medioambientales mayores: uno de las funciones del discurso ecologista mundializado es de ocultar esta realidad a la opinión pública (p.146).
Mientras las energías alternativas, no son desarrolladas y por causa, la globalización seguirá utilizando el petróleo como principal fuente de energía con consecuencias graves para el medio ambiente.
El libre cambio genera una incremento exponencial de transporte (donde lo esencial es asegurado por las energías fósiles). La globalización induce un consumo creciente de recursos energéticos contaminantes y no renovables (p.146).
De manera general, los mercados mundiales de la energía (principalmente del petróleo), de las materias primas, de tierras agrícolas e incluso ahora los derechos a contaminar, tienen un funcionamiento contrario a los tres pilares del desarrollo durable: el modelo económico dominante está en crisis crónico; las desigualdades se observan en todas las escalas; el medio ambiente no es eficazmente protegido. Aún más, la difusión mundial del consumismo y del productivismo es incompatible con la preservación del medio ambiente. (p.146 -147).
En suma el ecologismo global es una forma de acompañar las contradicciones inherentes al neoliberalismo (p.147).
El discurso ecológico podría ser utilizado para someter militarmente en un futuro a los países que no están en condiciones de hacer frente a este problema por innumerables factores. No se descarta intervenciones militares, tal como lo dice un académico francés.
Ciertos autores, como el científico francés Guy Béney, denuncia el riesgo de recuperación del discurso ecológico al servicio de los intereses mercantiles. La protección saludable del planeta corre el riesgo de llevar al nacimiento de un "ecofascismo" de tendencia "totalitario". Este argumento es muy empleado en los países emergentes. Estos últimos temen que la ecología sea utilizada oportunamente por los países más desarrollados afín de poner trabas el crecimiento de ciertas economías competidoras. Este temor explica una buena parte del fracaso en las negociaciones luego del Kyoto. Cada vez es más probable que algunas potencias emplearan en las décadas a venir el pretexto ecológico para justificar las acciones militares: luego de la injerencia "humanitaria", las guerras al servicio de los derechos del hombre, el siglo XXI conocerá probablemente aquella del imperialismo ecológico (p.150).
Lección 10: ¿Cómo se organiza la opinión de la globalización?

Para hacer frente a la globalización, surgieron muchas corrientes sin una verdadera proposición a largo término o simplemente no tienen las herramientas para alcanzar sus fines.
Esta esfera de influencia es una adición de militantes tercer-mundistas y regionalistas, de anticapitalistas de obediencia marxista o anarquista, de ecologista, de pacifistas y de sindicalistas. Reaccionan de manera muy poco concertados, los alter mundialistas se encuentran puntualmente dentro de los grandes eventos mediatizados, pero sin organizarse políticamente (p.157).
Los alter mundialistas, no son las más credibles y estructuradas, además de ser muy diferentes entre ellos. Los reformistas, los militares revolucionarios, los ecologistas, todos ellos están divididas. Los eventos en los Estados Unidos con el Occupy Wall Street nos revelaron este problema, no tenían una verdadera estructura, lo mismo sucede con los Indignados españoles.
El alter mundialismo sufre de una falta de credibilidad. Frecuente percibido como una indignación legitima, aparece aun como incapaz de asegurar la dirección de las tareas públicas (p.158).
Antes de las últimas elecciones presidenciales en Francia, se debatieron sobre la "desglobalización" encabezado por el Arnaud Montebourg  y los alter mundialistas, el resultado no produjo nada en concreto.
Este episodio de la vida política francesa demuestra que es difícil transformar un movimiento de indignación en fuerza de proposición (p.158).
Entonces ante todos estos fracasos, lo que queda es una verdadera responsabilidad de los soberanistas en el sentido estricto o amplio de la definición. Al menos es la que podemos percibir de los textos de Gilles Ardinat.
El saberanismo, doctrina política preconizando el Estado-Nación como forma suprema de gobierno, es un poderoso corriente de oposición al neoliberalismo [...] El saberanismo, sin rechazar el principio del capitalismo propone un modelo intervencionista que tiene vocación de remplazar la doctrina neoliberal.
Solo los Estados-Naciones parecen en medida de aportar un contrapeso a los actores mundializados y a los desórdenes de nuestra época. El soberanismo es entonces a la vez un patriotismo (defensa de la nación frente a la globalización) y un pragmatismo (la gobernanza mundial no aporta regulación eficaz) (p.159).
Para los soberanistas, la economía debe permanecer bajo control de la autoridad estatal. Así, las naciones, dotados de fronteras poderosas y de reglamentaciones exigentes, tienen vocación a regular los flujos económicos. El proteccionismo es un argumento recurrente en los medios. La globalización liberal, porque ella disminuye la autoridad del poder político sobre la esfera económica, es incompatible con lo ideal soberanista (p.160).
[...]
Los soberanistas combaten toda tentativa de gobernanza supranacional. [...] Solo los Estados-Naciones son legítimos y eficaces para organizar la globalización. Toda estructura jurídica superior a las naciones es rechazada en el nombre de la democracia y de la libertad de los pueblos (p.160).
En Europa los partidos soberanistas llaman a la disolución de la Comisión Europea y del Banco Central Europeo, porque estas instituciones imponen sus decisiones a los países miembros. Ante esto los soberanistas defienden los tratados bilaterales en lugar de bloques.
Para los soberanistas, la independencia de las naciones debe permanecer un principio superior a las consideraciones de las élites occidentales (p.161). [...] Los detractores de los soberanismos le reprochan de ubicar la regulación a nivel inadaptado, mientras que muchos fenómenos son mundializados (flujo financiero, inmigración, mercancías...). Muchos creen que el estatismo es obsoleto y que la globalización debe ser  regulada por las instancias supranacionales (p.161).
Los que proponen desarticular a un Estado-Nación, no hacen más que confirmar su intención mercantilista al detrimento del respeto elemental que todo individuo soberano tiene. Ardinat dice que en el plano político también los soberanistas están divididos, lo cual no es tan verdad a la realidad, en todos lados del mundo están emergiendo los soberanistas que si tienen propuestas contra la globalización.
Además lo soberanistas son frecuentemente divididos sobre el plano político, lo que constituye un obstáculo mayor. Es conveniente entonces de bien disociar los soberanistas de los alter mundialistas: los primeros son estatista y proponen soluciones constatadas, mientras que los segundos son libertarios y reflexionan a nuevas formas de organización social. Estas dos formas de oposición a la globalización liberal no pueden ser confundidas (p.161).
[...] Los alter mundialistas, que permanecen profundamente internacionalistas y progresistas, privilegian la tolerancia y la apertura. Los soberanista se oponen en cuanto a ellos a la violencia y a las tendencias hegemónicas llevados por ciertos partidos radicales. Todas estas críticas subrayan los peligros de una concepción demasiado restrictiva de la identidad. El anti globalismo, frecuente considerado como extremismo permanece políticamente muy aislado (p.165).

Libro: Comprendre la Mondialisation en 10 leçons, Gilles Ardinat, Ellipses Edition Marketing, 2012. 192 pag.
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Libro: Teoría del cuerpo enamorado de Michel Onfray

 Para terminar con la monogamia, la procreación, el matrimonio, Michel Onfray redefine el deseo como exceso, el placer como consumo, invitándonos a la sola voluntad de dos libertades solteras.
 
Después de El Poder de Existir,  ahora les traigo otra majestuosa obra del filósofo Michel Onfray, Théorie du corps amoureux, pour une érotique solaire (literalmente, Teoría del cuerpo enamorado, para un erótico solar).

En este libro Michel Onfray nos invita a terminar con la monogamia, la fidelidad, con roles caducos asignados a las mujeres por una sociedad dominado por los hombres. Cuestiona los roles de la mujer en la sociedad occidental, en detrimento de la sexualidad y sobre todo a la sumisión de la mujer.

Citaré algunos pasajes del libro para que ustedes tengan una mejor percepción de la teoría del filósofo.
Instalado francamente en las tierras antiguas, en guerra contra el modelo ético dominante, mi proposición reanuda sin rodeos con el proyecto de todas las escuelas filosóficas.  Y para hacer eso, querer abiertamente el fin de la vida mutilada, fragmentada, explosionada, diseminada que fabrica nuestra civilización alienante indexado sobre el dinero, la producción, el trabajo, la dominación. La filosofía puede contribuir a este proyecto radical. Incluso mejor: ella lo debe. (p.38)

Michel Onfray siempre nos repite que la filosofía que él practica no es de aquel que no sea perceptible y que contribuya directamente al individuo, él prefiero lo opuesto a la filosofía inútil.
Por mi parte, no me satisfago de una filosofía de pura investigación que consagra lo esencial de su tiempo y de su energía a solicitar las condiciones de posibilidad, a examinar las bases epistemológicas sobre las cuales se pueden hacer preguntas. Yo prefiero considerar, en la otra extremidad de la cadena reflexiva, la suma de afirmaciones y resoluciones útiles en la realización de una existencia lanzado a velocidad plena entre dos nulidades. (p.38-39)
Sobre el terreno filosófico, yo me intereso prioritariamente aquellos que encuentran en lugar de aquellos que buscan - y yo siempre he preferido un pequeño hallazgo existencialmente útil que una gran investigación de filosofía inútil en la vida cotidiana. (p.39)
Las teorías, si se pone en práctica y que ésta tiene como resultado la mejora del individuo en su estado de salud física y mental, bienvenidos sean todas.
Así, el filósofo actúa en médico del alma, en terapeuta, en farmacéutico. Él sana y disipa las molestias [...] La vida filosófica se vuelve alternativa a la vida inútil después de la sola decisión de seguir un tratamiento: cambiar su vida, modificar las líneas de fuerza, construirla según los principios de una arquitectura responsable de un estilo propio. (p.41)
Pero, este estilo propio debe ser bien estructuradas para no caer en la impotencia al no llegar al objetivo y, con ello una frustración antes que un goce. Y, no solo eso, sino también conlleva a una vida de miseria.
La aspiración a la perfección genera más impotencia que de satisfacción, la voluntad de pureza procura más frustración que de plenitud. (p.66)
Onfray nos recuerda que cualquiera que sea, la concepción del amor en occidente procede del platonismo y de su diversidad de formas que vino tomando por más de 2 000 años de nuestra civilización.
De todas maneras, la concepción del amor en Occidente procede del platonismo y de sus metamorfosis en los ojos mil años de nuestra civilización judío-cristiana. La naturaleza de las relaciones entre los sexos hoy en día supone históricamente el triunfo de una concepción y el fracaso de otro: éxito integral del platonismo, cristianismo y apoyado por el omnipotente de la Iglesia Católica durante alrededor de veinte siglos, luego inhibición poderosa de la tradición materialista - tanto democristiana, epicuriana que cínico o cirenaico, que hedonista o eudemonista. (p.75-76)
El platonismo enseña teóricamente el cruel olvido del cuerpo, el desprecio de la carne, el alago del afrodita celeste. La dureza del ascetismo platónico cristianizado engendra y genera sufrimiento, dolor, pena y frustraciones en cantidades, así lo atestiguan los médicos, terapeutas y sexólogos - es decir la miseria de la carne gobierna el mundo. En todos estos casos la religión y la filosofía dominante se asocian siempre y hasta hoy que derraman una maldición sobre la vida.
Una teoría del libertinaje supone un ateísmo revindicado sobre el terreno amoroso clásico y tradicional junto con un materialismo combativo. Allí donde los vendedores de cilicio triunfan con las redes cuadradas, las esferas y las otras, el libertino se divierte de los aventuras del pez masturbador, del gruñido de los cerdos de Epicúreo y de las libertades del erizo soltero. (p.78)
Demócrito lee el amor como una energía proveniente de una especie de disposición de átomos, a la manera de una fuerza que fluye las diversas formas de la materia.
El deseo aumenta fluidos, fuerzas, energías cuantificables, mesurables, susceptibles de dejar huellas visibles para la observación, la circunscripción y recurrir a una matemática conceptual. Ninguna mitología, de ontología para explicar el deseo, sino un género de medicina, de física, incluso de mecánica. El ojo del filósofo materialista quiere lo visible, lo constatable y se niega a las fantasmagorías religiosas. El deseo define el resultado de una constitución material, porque lo real se limita a los átomos y a sus relaciones en el vació. (p. 84-85)
Una de las características particulares en los libros de Michel Onfray, es la frecuencia con la que remarca la intención de exterminar los mitos. Luego del deseo material y atómico, del placer solitario y solipsista: la doctrina de los materialistas continúa de destrozar los velos de la ilusión y socava las ficciones romanescas escritas a lo largo de todo el tiempo sobre este tema.
Ayer los mitos y las historias elaboradas, hoy la razón y las lecturas petrificantes. La lucidez exige un tributo sin concesión. (p.95)
El cuerpo sumiso a las necesidades de alimentos y de bebida, no hay nada condenable. De la misma manera, cuando él conoce el imperio del libido, ¿Por qué tendría que ser signo de maldición? ¿Vestigio de vergüenza? La carne, los átomos, la metería sufren sobre el modo apremiante de las ganas, de las pulsiones, de las necesidades. Satisfacerlos así como lo hacen los animales en la naturaleza obedeciendo las leyes de la naturaleza.

Nacer, vivir, gozar, sufrir, envejecer y morir revelan la incapacidad a endosar otra historia que la suya propia y la imposibilidad visceral, material, fisiológica de sentir directamente la emoción del otro.
El deseo trágico y universal; la física prolongada en ética, el placer revelador del solipsismo, Lucrecia continua su investigación materialista por el enunciado de la victoria absoluta de la entropía. El tiempo pasa y destruye todo aquello que toca, del deseo al placer, del amor a la pasión. (p. 113-114)
Para Lucrecia el deseo y el placer pueden esculpirse, dándole la espalda a los inconvenientes del deseo amoroso y en consecuencia a los placeres simples y fáciles de la pura voluptuosidad convertidos en voluptuosidad pura: evitar el amor no significa renunciar a los goces que el proporciona, sino, al contrario, aislar las ventajas y los inconvenientes.
¿Y cómo  gozar de los beneficios? Sacrificando sólo a los amores de paso, queriendo el movimiento, y huyendo todo lo que detiene: la monogamia, la cohabitación. (p.115)
El paraíso no está en los cielos, el paraíso la construyes aquí en la tierra y a cada instante, siempre en cuando dejes de lado las taras religiosas, sobre todo aquellos del monoteísmo.
Otros personajes bien inspirados e informados, en la ocurrencia los autores anónimos del Physiologus medieval, asociando a la pareja de elefantes la ideal representación de Adam y Eva cuando ellos vivían felices, antes de la falta, en el paraíso inventado por Dios para ellos. El macho y la hembra, se dice, hasta ignoraban la existencia de la sexualidad. Evidentemente, ahí está  una definición irrefutable del paraíso: la inocencia de los cuerpos... (p.125)
Las tres religiones que profesas el monoteísmo, son las que mas problemas causan sobre el hombre y sobre todo en las mujeres, condenándoles a ser sumisas, todo lo opuesto a las intenciones de que todo libertario busca - igualdad entre ambos sexos en todos los niveles.
En materia de placer, el gran anatema histórico e inaugural en Occidente se orienta indiscutiblemente en el pensamiento judío y más particularmente en el Antiguo Testamento. El Antiguo Testamento, lo sabemos, abundan imprecaciones contra la carne, los deseos y los placeres, él fustiga el cuerpo, las sensaciones, las emociones y las pasiones, su odio a la vida es sólo comparable a su odio a las mujeres. Porque el monoteísmo judío inventa la misoginia occidental, la formula, le da sus cartas de nobleza, luego permite al cristianismo y al Islam para continuar la labor iniciada hilando primero la metáfora del odio del cuerpo de las mujeres, luego la de las mujeres en su totalidad. Tora, Nuevo testamento y Corán fabrican y legitiman un mundo construido sur la desconsideración generalizado de la mujer. (p.128)
Un Dios violento que prohíbe los placeres de la carne, hoy en día mucho viven bajo ese imperio que no hace más que alimentar la culpabilidad, temor, miedo, angustia, disgusto con uno mismo.
El desprecio de las mujeres sostiene siempre el edificio conceptual de los defensores del ideal ascético. La elaboración de una teoría del libertinaje requiere superar del masculino mal asegurado, vivido sobre el modo arrogante de la violencia y de la agresión. (p.130)
Contra el inigualitarismo misógino, se trata de promover el igualitarismo libertino. (p.130)
Entonces los filósofos dignos de este nombre, aquellos que quieren saber, conocer y muestran un talento mesurado para obedecer y consentir, deberían alabar a Eva por su elección: ella decide a pesar de la prohibición de utilizar su libertad para hacer retroceder la sumisión y avanzar la inteligencia. Porque el texto de Génesis no disimula los reproches dirigidas a la primera mujer: ella prueba el fruto del árbol del conocimiento - deseable para adquirir la inteligencia; dicen los versos - que permite distinguir el Bien del Mal (p. 133).
Es decir, Eva desobedece el mandato de quien prohíbe, manda a los hombres a la sumisión intelectual.

En otra parte del libro, el filósofo Onfray condena  las soteriologías religiosas, aquella que te hace creer que existe un paraíso, un purgatorio o un infierno.

El placer reside menos en un objeto hipotético, imposible de alcanzar, siempre frustrante que en la dimensión completamente real y visible.
El libertinaje invita a descubrir el goce puro de la existencia, de estar en el mundo para vivir, de sentir la energía en movimiento, fuerza dinámica. Incluyendo  sobre el terreno amoroso, sensual o sexual; (p.183)
En materia sexual, no vale la pena prohibirse, salvo aquello que contraviene a la paz del alma construida a lo largo de la vida, no importa si eres joven o anciano, sabio o no, con tal que se practique un Eros ligero, "accesible y fácil" como lo dijo Horacio - punto focal de todo libertinaje desde sus orígenes, nos recuerda Onfray.
Una historia se vuelve libertina cuando ella ahora absolutamente, y en el menor detalle la libertad de unos y de otros, su autonomía, su poder de ir y de volver a su modo, de usar su potencia nómada. (p.184)
El cuerpo ligero, el Eros sutil, el vitalismo quintaesencia, la sexualidad desculpabilizada, la carne feliz, subrayando la dimensión eminentemente lúdica de todo libertinaje.
El erótico solar se apoya sobre una voluntad formidable de goce donde en la que el principio axiomático que implica un gran sí a la existencia, un doble y mutuo consentimiento inmediato a las fuerzas que nos trabajan y amenazan desbordamiento. (p.185)
La concretización de una ética lúdica entrega los cuatro puntos esenciales del libertinaje: permanecer libre, vivir el presente, rechazar la pesadez, practicar el juego. Bajo todas las latitudes, la imagen del libertino propone el nomadismo a las antípodas del vivo de la inmovilidad: sedentario, duración, pesadez. El exceso contra la economía, el gasto contra la pusilanimidad, el cuerpo contra el alma, la vida contra la muerte, el júbilo contra la tristeza, la sensualidad contra la castidad, el celibato contra el matrimonio.  
Ovidio escribió: "La mujer virtuosa es aquella que no recibió ninguna propuesta." No nos imaginamos a que se parece un hombre virtuoso - si no a un prototipo de oxímoron promovido caso de escuela en retórica.... (p.191)
Pero, es necesario tener en cuenta que la ética libertino que Onfray nos dice en este libro, es aquella que aspira a evitar los desplaceres, así como una realización apremiante de los placeres.   

También, Onfray busca terminar con el patriarcado, matriarcado, desigualdades; rechaza la violencia falócrata, el poder del uno sobre el otro. El libertinaje solar comprende esencialmente al hombre y a la mujer sobre un mismo plano. Lo que sirve para uno en el ámbito sexual, sirve para el otro, sin ninguna excepción.
Y el hombre, y la mujer, si es posible en el mismo tiempo, deben experimentar el éxtasis, cambiar juntos y en un instante parecido del lado y la voluptuosidad. No sacrificar a la mujer en la descarga vulgar y bestial del hombre siempre imperioso y emergente: las dos solitudes existenciales formulan paradójicamente un contrapunto sensual del contrato libertino. (p.196)
La ley natural obliga a escuchar las lecciones de la carne, prepararse para los ritmos,  latidos del corazón, respiraciones, ella motiva observar las formas, a practicar la anatomía.
La mujer no se determina por su vientre, sus ovarios y su útero; no más hombre por sus testículos y su escroto. Las diferencias naturales no se vuelven desigualdades culturales después de la decisión, siempre masculina, de explotar lo diverso para jerarquizar, ordenar y estructurar una visión del mundo en la cual los machos se reservan el mejor rol. (p.213)
Donde se encuentran los dualistas y su oposición furiosa entre un mundo celeste, ideal, puro, inteligible y un universo terrestre, concreto, impuro, sensible. Evidentemente, pensamos en Platón, el más celebre partisano de esta esquizofrenia ontológica.

La teoría idealista trabaja para encantar en el sentido de Dios, en algo incansable o inaccesible, imposible de obtener con las categorías racionales. Solo una conversión mental, un proceso intelectual dejan percibir este mundo que, por lo tanto pasa para gobernar todo lo real sensible.

A todo esto, es evidente la necesidad de una armonía. Pitágoras quiere el orden del cielo sobre la tierra, él llega a legitimar el orden de los hombres sobre el mundo de las mujeres en nombre de una hipótesis mamarracho aumentado de una fisiología tiránico. En lugar de continuar bajo esas normas religiosas, lo real encuentra los puntos de equilibrio, las oportunidades de estabilidad, rechazando el mundo dualista.
Menos prosaico, más trivialmente, la realización del hombre y del orden pitagórico supone que la mujer consienta en un triple rol: ama de casa, madre de familia, modelo de esposa. ¿Quién rechaza actualmente está triple función reductora para las condenadas del sexo femenino? ¿Quién rechaza la esclavitud de la mujer en estos registros de esclerosis? ¿Quién prohíbe la sumisión del destino de las mujeres a esta serie de trivialidades ancestrales? Si no un libertino. ¿Quién cuestiona estos modelos caducos? ¿Quién critica estos roles, desprecia estas funciones, deshonra estas distribuciones? ¿Quién socava estas tres pretendidas vocaciones naturales? El libertino. ¿Quién se regocija de reducir a las mujeres a la vida doméstica, la maternidad, la conyugal? ¿Quién celebra el lazo conyugal, el deber conyugal, la fe conyugal? ¿Quién quiere a la dama, a la burguesa, a la ama de casa, a la cocinera? El misógino portador de su falo a la manera de un gnomon. Y todas las generaciones confundidas, cantidad de hombres fabricados mentalmente sobre estos principios. (p. 228-229)
En la parte final del libro, Onfray termina con un género moderno de tetrafarma con: lo real es atómico, el vitalismo es necesario, el placer es realizable y lo negativo es conjurable, detestable y destructible. 
Sobre el terreno existencial carnal, tal como lo considera esta Teoría del cuerpo enamorado, los ejercicios espirituales invitan a la promoción de un erotismo solar, de un vitalismo lúdico y de patético alegre. Todo se propone la realización del antiguo proyecto epicúreo: gozar del puro placer de existir. (p.295)
Una obra muy interesante de Michel Onfray, contra toda una vida mutilada, de vergüenza, de supremacía de lo masculino sobre lo femenino, donde los mitos reinan por doquier, etc. Leer la Teoría del cuerpo enamorado, fue un placer y un gozo mental que se inscribe completamente para ser compartido con todos, pero antes requiere que la sociedad sea un poco menos influenciado por le monoteísmo.

Libro: Théorie du corp amoureux, pour une érotique solaire, Michel Onfray, Editions Grasset & Fasquelle, 2000. 304 páginas.

Documental: Perú, el reto de leer

Leer, es el mejor ejercicio terapéutico para mejor el estado o la salud de un individuo, pero es aún mucho mejor, si permite cambiar y hacer avanzar a una sociedad dejado de lado hace mucho tiempo.

El programa La Aventura del Saber de la televisión española emitió el 04 de mayo del 2013, el documental Perú, el reto de leer, en la cual se muestra un gran labor de jóvenes y adultos que voluntariamente apoyan para que la lectura llegue a las zonas rurales del Perú, a través de la implantación de bibliotecas.

En esta labor también participan la Universidad Nacional Mayor de san Marcos (Perú) , la Universidad Complutense de Madrid (España), la asociación Una Biblioteca para mi Pueblo y el Movimiento Indio Peruano.
Una labor muy loable de los que promueven estas actividades. La labor principal debería ser impulsaba por el gobierno central o local, pero muchas veces por desconocimiento o por intereses mezquinos, dejan de lado lo más importante, la educación y el sano entretenimiento que se le debe dar a los niños.

Libro: El poder de existir de Michel Onfray

¿Qué somos capaces de hacer cada uno con nuestro cuerpo? ¿Qué podemos esperar de la ciencias modernas para un post humanismo? o ¿Cómo descristianizar el cuerpo occidental? Son algunas de las tantas que podemos encontrar en el El libro La puissance d'exister (el poder de existir) del filósofo francés, Michel Onfray (*).

Un libro que desenmascara la histografía dominante que no hacen más que contar fábulas que a fuerza de repetición se convierten en verdad y palabra de evangelio. Los robos de las citaciones, tal como se ven en muchos países europeos en la actualidad. Muchas editorialistas no se empeñan en verificar si lo que están publicando es verdad o simples mitos, en este sentido que Michel Onfray enfoca en cada una de sus libros, pero en esta oportunidad voy a ir al libro ya antes mencionada.

Entre estas fabulas que nos cuentan los intelectuales falsarios, están por ejemplo la siguiente idea, cito:
La filosofía nace en el siglo VII antes de Jesús Cristo en Grecia con los individuos llamados presocráticos. Esta sola frase contiene al menos tres errores: Una de fecha, uno de lugar, uno de nombre. Porque se cree mucho antes a esta fecha en Sumeria, Asiria, Babilonia, Egipto, India, China y otros bárbaros según el punto de vista de los griegos. En cuanto a los presocráticos, he aquí un cajón de sastre muy útil para evitar ir a examinar más de cerca. (p.54)
En efecto Michel Onfray, nos muestra un momento situado antes de Sócrates. Si se toma la fecha de nacimiento, cerca de 469. O aquel de su muerte 399. O aun aquella de su apogeo 350. En una buena lógica, puede decirse presocrática un evento - la caída de Tales en un pozo -, un libro - el poema de Sobre la naturaleza de Empédocles-, un filósofo - Heráclito, Parménides, Demócrito -, un pensamiento - el atomismo abderitano. O ¿Quién podría explicar que la filosofía de Abdera puede ser el presocrática, sabiendo que las estimaciones permiten de hacer un cuasi-contemporáneos del nacimiento de Sócrates, mientras que sobrevive tres décadas? por consiguiente, ¿Por qué este error flagrante - avalado pero no corregido por Jean-Paul Dumont en su edición de la Pléyade? Se cuestiona Onfray.

Y, así podemos citar otros ejemplos, pero dejémoslo ahí. Michel Onfray, quien en varias oportunidades declara que la filosofía le salvo la vida, sin ella no habría sido lo que hoy es, un libertario que va en contra corriente al pensamiento dominante. La filosofía sana su ser, lo constituye, lo estructura, lo solidifica y propone enseguida su auto terapia como una soteriología generalizada. Filosofar, es hacer viable y vivible su propia existencia, allí donde nada está dado y todo queda por construir.

Tampoco un filósofo debe ser aquel que solo comenta textos de sus antecesores, sino todo lo contrario, requiere de una reflexión profunda, análisis y de una relación intima entre el pensamiento y la acción, entre la teoría y la práctica. Cito:
La biografía de un filósofo no se resume en un solo comentario de sus obras publicadas, sino de la naturaleza del enlace entre sus escritos y sus comportamientos. Más que otro, la filosofía debe tener ligado estos dos tiempos a menudo opuestos. La vida se alimenta de la obra que ella misma nutre la vida: Montaigne lo hizo el primer descubrimiento y la demostración, él sabe qué hace un libro, y éste es tanto aún más notable ya que él nos constituye también a cambio. (p.78)
El filósofo, Onfray apuesta por una filosofía pragmática e útil y no por las tantas otras enemigas de ella., vuelvo a citar:
Quiero de una filosofía utilitaria y pragmática, y no su enemiga hermana: idealista y conceptual. Sola la primera permite el proyecto existencial. (p.79)
Pero, hay que aclarar bien las nociones de los términos. En efecto, porque en la tradición clásica, el utilitarismo y el pragmatismo son entendidos en doble sentido.
Así materialista: según el filósofo, pensador que afirma el mundo reductible a un puro y simple disposición de materia; pero también, para el común de los mortales, individuo obsesionado por la acumulación de bienes y riquezas [...] El sofista profesa una perspectiva metodológica, el expresa simultáneamente para el numero más grande el individuo aficionado de razonamiento engañoso pretenden tener éxito por todos los medios.... (p.79-80)
El utilitario, hay que ver en dos campos diferentes, es decir en los filósofos  y en el común de la gente. Para los filósofos anglosajones, según Onfray, el pensamiento es claro, preciso, legible, libre de todo a priori metafísica y sobre todo que produce efectos en la vida cotidiana, en lo real. Y para el hombre común de la calle, el utilitarismo estigmatiza el comportamiento de una persona interesado en sus relaciones con los demás, incapaces de generosidad y de gratitud.

Parecido comportamiento con relación al pragmatismo. Filosóficamente, esta corriente pone en perspectiva el conocimiento y el fin racional. En otras palabras: este nuevo positivismo propone una teoría de la verdad rechazando el absoluto de los idealistas a favor de la relatividad epistemológica.

El utilitarismo pragmático, que nos propone Onfray es renviar al consecuencialismo filosófico: no existe verdades absolutas, ningún bien, de mal, de verdad, de juste en uno, sino relativamente a un objetivo claro y diferente.

Un sistema hedonista

Michel Onfray, comprometido por la contra-historia de la filosofía alternativa a la histografía dominantes idealista, defiende la razón corporal, por una perspectiva existencial donde todos convergen en un sólo punto: el hedonismo: goza y haz gozar, sin dañar ni a ti ni a alguien, he aquí toda moral. (p.81)

Onfray, quien se opone a la teoría platónica del deseo como falta una lógica de Demócrito del exceso amenazando desbordamiento; cuando propone un feminismo libertaria que celebra la mujer contra el culto judío-cristiana de la virgen, o de la esposa y de la madre; cuando Onfray defiende el contrato escrito perpetua reconducible en lugar del matrimonio, entre otros; Onfray se convierte en un libertario emblemático (p.83), según sus propias palabras del filósofo. Quien, también defiende un pensamiento fuerte, sólido, estructurado, coherente y trata de examinar minuciosamente la totalidad de los conocimiento posible.

En referencia a la ética colectiva, la segunda parte del libro donde habla de la moral ateológica, la necesidad de la descristianización del hombre occidental, por ejemplo, él escribe: Los términos de alternancia oscilan entre los monoteístas : judío-cristiano o musulmán, podemos querer evitar este desastre impase optando por una tercera solución : ni el uno, ni el otro, sino, en otro lugar, un verdadero ateísmo que rechaza también la Tora, el Nuevo testamento y el Corán para preferir la Ilustración de la razón y el brillo de la filosofía occidental. Contra la religión del Libro único que no quiere a los otros libros y comulga en el odio de la razón, de la inteligencia, de las mujeres, de los cuerpos, de las pasiones, de los deseos, de la vida, y en todas partes, juguemos más bien el espíritu de la Enciclopedia de Diderot y D'Alembert...
Démosle la espalda a las ficciones, a las fábulas y, dirijámonos mejor hacia la filosofía... (p.93)
Michel Onfray, siempre en sus textos hace mención a los ignorados del mundo intelectual, no solo los de la actualidad, sino también de la época de la Ilustración. La histografía dominante que hasta hoy tienen entre los Ilustrados a muchos teístas, deístas o panteístas, concesiones hechas al espíritu de la religión cristiana. Entre los verdaderos ateos puros, precisos, directos que defiende y reivindica Onfray están Meslier, Holdbach, Julien Offray de La Méttrie.  Un inicio del nuevo mundo post cristianismo en el siglo XVIII. Un ateísmo que merece hoy en día una definición reafirmado contra el imperio de los monoteístas.

Para Onfray, un ateísmo post cristiano conserva el principio de la peligrosidad de Dios, cito:
Este ateísmo no niega su existencia, sino la reduce a su esencia: la alienación fabricada por los hombres según el principio de la hipóstasis de sus propias impotencias concentradas en una fuerza inhumano, en el sentido etimológico, adorado como una esencia separado de sí mismo. Según el principio bovárico, los hombres no quieren verse tal como son: limitados en su tiempo, su poder, su saber, su fuerza. Por lo tanto, ellos imaginan a un personaje conceptual dotado de atributos que les falta. Así Dios es eternal, inmortal, omnipresente, omnisciente, etc. (p.95)
Una vez que todas ficciones  y misterios esclarecidos, el ateísmo tomaría su lugar para llegar a un post cristianismo, donde la libertades individuales cortadas por el Nuevo testamento, tomarían su fin.

En otra parte del libro, Onfray describe al delincuente relacional, aquel que ni responsable, ni culpable, reporta una serie de arreglos existenciales convirtiéndole en un incapaz de mantener una relación ética. Y en caso de amenaza para el delincuente relacional, la solución es una reacción proporcional: la anulación.  Por otro lado el hedonismo se define positivamente por la búsqueda del placer, pero también negativamente como evitar las ocasiones de desagrado.

Frente a los ojos de los adversarios, es necesario hacer una diferencia ente individualismo y egoísmo. La primera afirma que sólo existen individuos, el segundo que no existe más que el -, autismo, consumismo, narcisismo, indiferencia a los males de los demás y de la humanidad todo entera...

En realidad el hedonismo defiende exactamente lo contrario. Cito:
El placer no se justifica jamás si se debe pagar del disgusto del otro. Solo existe una justificación al disgusto de los demás: cuando no podemos hacer lo contrario para evitar el imperio destructor de la negatividad de un tercero. En otras palabras: cuando la guerra se hizo inevitable. (p.115)
En la tercera parte del libro, dedicado al erótico solar. Veinte siglos de cristianismo, tiempo vasto como para dejar impregnado las esquizofrenias de los religiones en casi todo el mundo donde llegaron los religiosos. Cito, otro pasaje del libro:
El erotismo es antídoto a la sexualidad definida por su naturaleza bestial: cuando el sexo habla sólo expresa las pulsiones las más brutas del cerebro reptil; cuando el sexo de manifiesta en el artificio, él toma lo mejor de la civilización que lo produce. (p.122)
Si se busca durante el  judío-cristiano en las civilizaciones a los eróticos chinos, japoneses, nepaleses, griegos, romanos, etc., no encontrará más que odio de los cuerpos, de la carne, del deseo, del placer. Ningún arte de gozar católico, pero un inteligente dispositivo castrador y destructor de toda tendencia hedonista. Onfray dice que uno de los pilares de esta máquina para producir eunucos, vírgenes, santos, madres y esposas en cantidad, se efectúa siempre en detrimento de lo femenino en la mujer.

Libido libertario

Antes de iniciar con el análisis de Onfray, es necesario hacer una diferencia entre amor, sexualidad y procreación, porque si no tendremos algunos problemas para entender el libido libertario. Primero, como es de conocimiento la iglesia condena el nacimiento de un niño fuera del matrimonio de los padres, también la iglesia se opone al uso de los contraceptivos. Pero gracias a la ciencia ahora es posible la fecundidad, que igualmente la iglesia lo prohíbe. Onfray dice si añadimos a la ley de Neuwirtth [ley francesa que autoriza el uso de contraceptivos, promulgada el 28 de diciembre de 1967; NDRL] la ley de Veil [Ley francesa que permite la interrupción voluntaria de embarazo, promulgado el 17 de enero de 1975; NDRL]. Allí aun una autentica revolución.

Segundo, Michel Onfray dice que, para hacer posible la sexualidad sin el amor, si lo definimos el amor como el sentimiento promulgado para hacer retroceder en la sombra la exigencia de la naturaleza bajo el dispositivo de la pareja monógama, fiel y cohabitación.
Porque una separación con el amor, no excluye la existencia del sentimiento, de la afección o de la ternura. No querer comprometerse para la vida en una historia de larga duración no prohíbe la promesa de una dulzura amorosa. La relación sexual no está destinada a producir efectos en un futuro más o menos cercano pero a gozar plenamente del puro presente, a vivir el instante magnifico, a agotar aquí y ahora en su quintaesencia. (p.130)
Un  soltero o soltera, no siempre está sin la compañía de alguien o sin pareja atraída, al contrario se define como alguien, incluso comprometido en una historia que podríamos decir amorosa, conserva las prerrogativas y el uso de su libertad. Es alguien quien goza de su soberana autonomía.

Ahora pasemos a la metafísica de la esterilidad. La posibilidad fisiológica de concebir un niño no obliga el pasaje al acto - todo como el poder de matar no genera en nada el deber de ejecutar un homicidio. Textualmente Onfray escribe:
Si la naturaleza dice: "Usted puedes", la cultura no adiciona forzosamente: "Entonces usted debe". Porque es posible someter sus pulsiones, sus instintos y sus deseos en la rejilla analítica de la razón. ¿Para qué tener hijos? ¿En nombre de quién? ¿Para hacer qué? ¿Qué legitimidad tenemos para hacer surgir de la nada a ser al cual proponemos, en definitiva, sólo un breve pasaje sobre este planeta antes de regresar a la nada de la cual proviene? (p.134)
A la cual, responde haciendo un llamado a los que se obedecen ciegamente para engendrar, mientras que este acto fuertemente metafísico debería obedecer una elección racional, razonable e informada.

En otra parte del libro, Onfray trata la bioética. En este asunto, una vez más vemos que muchos de la opiniones en contra o en favor, de alguna manera tienen una cierta dosis de los perjuicios provenientes de la religión o simplemente como dice Michel, aún muy frecuente vivimos con un cuerpo platónico, un cuerpo esquizofrénico dividido en dos partes irreconciliable donde el uno, digamos ejerce un dominio considerable sobre el otro. : La carne domina el alma, la materia posee el espíritu, las emociones sumergen la razón, etc.

Es esta dicotomía que sufre el cuerpo occidental en la vida diaria, en los problemas de salud, medicina o todo lo que concierne de alguna manera a la bioética. Esta disciplina que podría y de hecho que lo es, en beneficio de la humanidad, sin embargo no es bien recibido por la tradición filosófica idealista incapaz de responder a los desafíos propuestos por estas cuestiones nuevas que solo una filosofía utilitaria et pragmática pude resolver. (p.175)
 
Un fantasma se asoma sobre las consciencias - o mejor dicho en los inconscientes - aquel del ángel, modelo absurdo de lo ideal platónico-cristiano. ¿Qué es un ángel? Una criatura de éter y de sueño, un viviente sin vida, una encarnación sin carne, una materia inmaterial, un anticuerpo escapando a las leyes habituales del cuerpo: él no nace ni muere, no goza ni sufre, no come ni duerme, no piensa ni copula. (p.176)

Todo esto, para Onfray, no sería tan grave si este modelo no constituyera aun el esquema del cuerpo occidental. Compuesto de cuerpo y alma hasta en las obras de Freud.

EL cuerpo real, el contrario del ángel, bebe, come, duerme, envejece, sufre, muere, esta compuesto de nervios; es decir estamos lejos del éter. Por otro lado la construcción de un cuerpo occidental, según Onfray, se efectúa con la neurosis de Pablo de Tarso, gran rencoroso de sí. Muchos siglos de patología griega y latina, de escolástica medieval y de filosofía idealista transmitidos por los pecados, sermones, discursos simplificados por el clero hacia el pueblo durante miles de años, dejando como herencia un cuerpo mutilado.

En filosofo Onfray, también escribe sobre el post humanismo, con la cual particular me converjo con estas ideas y de todo quienes buscan el bienestar de la humanidad vía la ciencia y la tecnología. Y un medio, entre otros, de este post-humanismo, para Michel Onfray, es  la transgénesis. Quien, por otro lado no del todo apoya la idea del clonaje, porque para él sería la producción industrial de individuos idénticos en la perspectiva de una humanidad realizando la fantasía fascista de la masa embrutecida ordenado por la élite del poder....Bravo para la ciencia-ficción, pero cero en materia de ciencia. (p.184)

Continuando, con lo humanidad, pero desde los orígenes del viviente. ¿Pero cómo definir la vida?  Onfray la define como el juego entre los dos vacíos, entendiéndose que toda existencia supone una salida de la nada en la sola perspectiva de regresar allí un día. Pero precisando que entre estos bordes es difuso, que permitirían decir un antes, durante y después, nos dice Onfray, para luego lanzar algunas preguntas: ¿Qué un ser procede de un espermatozoide y de un ovulo, nadie lo ignora, pero cuál es la posición filosófica de estos dos objetos separados? ¿De la semi-vida? ¿De la viva potencial? ¿Dos fuerzas complementarias, vivientes, pero exigen la reunión para una otra vida, real, verdadera esta vez? (p.191)

Después de una breve explicación, Onfray dice que la humanidad del hombre se inscribe por lo tanto entre el vivientes, entre los dos vacíos. Obviemos la discusión del proceso biológico segundos después que el espermatozoide ingresa al ovulo, porque ni el embrión es persona. Pasemos al punto para ver en qué momento el hombre se hace humano. Cito:
La humanidad surge en un hombre no con su forma (humana) sino con su relación (humana) en el mundo. El puro estar en el mundo no es suficiente, la cucaracha también está en el mundo. Hace una falta una conexión, una relación interactiva, un enlace con la realidad tangible.

Porque la capacidad de un ser supone en él la capacidad de percibir el mundo que lo rodea, a sentirlo, comprender, etc. Para hacer eso, mínimamente se requiere un grado de desarrollo neural. Onfray dice: Porque en los primeros días o semanas no es suficiente al agregado de materia y de células para constituirlo más allá del viviente sin realidad personal. La materia gris debe poder reaccionar a los estímulos reductibles a dos tipos: la capacidad a sentir el placer y la posibilidad de rechazar el dolor - la base del hedonismo. Científicamente, esta posibilidad anatómica se sitúa en el vigésimo quinta semana de existencia del feto. He aquí la fecha a partir de la cual él sale de la nada para entrar en el humano, habiendo estado vivo desde el encuentro espermatozoide/ovulo. (p.192-193).
Pero, ¿Qué pasa cuando llega en fin de un individuo, ¿Cómo abordar la muerte? Entre sus análisis de Michel Onfray, podemos leer: La teología debe ceder el lugar a la filosofía, el cristianismo  desaparecerse para permitir a la sabiduría antigua - estoica y epicúrea en prioridad... (p.196). Porque la muerte se supone la abolición de lo que nos hace sufrir o disfrutar. Nada que temer.

Y, en la sexta y última parte del libro está consagrado a la política libertaria. Pasando por la revolución francesa, la caída del muro de Berlín, la desaparición de la Unión Soviética, pasando por las dictaduras militares nazis y Mussolini durante más de 70 años. Luego de tantos años de poder ¿Que queda? Nada...un país durmiente, paralizado de miseria generalizado, profundamente traumatizado, marcada por muchas generaciones. Ninguna producción literaria, filosófica, cultural, artística digna de este nombre: una catástrofe integral. (p.202).

Un adversario liberal que ganó sin antes ir al combate, producto de eso, un ganador decidido a reemplazar la miseria soviética por la miseria liberal. Donde los mercados se abrieron y con ello la generalización de la prostitución, el dinero sucio reina por todos lados donde hay poder, aparición de hambre, aumento de la lógica consumista, tráficos internacionales de materias fisionables, guerras entre etnias, etc.; Marx fue considerada una plaga planetaria, Tocqueville se convertía en la Cólera generalizada.

Para finalizar, Onfray, nos habla de la política hedonista y libertaria post moderna que no considera como objetivo la creación de sectores puntuales, de espacios libres, de micro espacios para hacer frente al micro fascismos. La posición libertaria propone una práctica existencial en todas las ocasiones y todas las circunstancias. Adicionado lo que dice Onfray sobre la anarquía, iría al frente de la catástrofe., es por eso que una sociedad anarquista seria siniestra e improbable. Sin embargo, un comportamiento libertario, incluso en una sociedad pretendiendo realizar la anarquía, allí una solución ética - por lo tanto política. Porque el objetivo, aquí como en cualquier parte del mundo, es el mismo: crear las oportunidades individuales o comunitarias de ataraxia real y de serenidad efectiva (p.230).

Un libro, muy interesante, donde nos invita a la reflexión, el análisis de la humanidad para una mejor convivencia. El poder de existir.

Libro : La puissance d'exister, Michel Onfray, Editions Grasset & Fasquelle, 2006, 230 páginas.
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(*) Michel Onfray, doctor en filosofía, fundador de la Universidad Popular de Caen en octubre del 2002, de la Universidad Popular del gusto en Argentan en el 2006 . Y más recientemente, un Teatro Universidad Popular del Teatro en el 2013.

Es autor de unos sesenta libros en las cuales él propone una teoría del hedonismo: ¿Cómo pensar como un artista? ¿Cómo instalar un campo de la ética de la estética? ¿Qué relaciones existen entre el hedonismo ético y el anarquismo político? ¿Según qué modalidades una filosofía es aplicable? ¿Qué posibilidades el cuerpo puede esperar de las ciencias post-modernas? ¿Cómo descristianizar la episteme occidental?

Sus obras :

Su trabajo lo llevó a celebrar el sentido criticado, como el olfato y el gusto: Le Ventre des philosophes. (1989) (Premio de la Fundación, Premio Chiavari), L’art de jouir. (1991), Les Formes du Temps. (1996) y laLa Raison Gourmande. (1995, Premio Libertad Literaria).

Sin embargo, no deja de lado los sentidos visuales y ofrece una estética contemporánea: L’Oeil Nomade (1993), Métaphysique des Ruines (1995), Splendeur de la catastrophe (2002), Les icônes païennes (2003), Epiphanies de la séparation, (2004), Le chiffre de la peinture (2008) examina las pinturas de Jacques Pasquier, Monsu Desiderio, Vladimir Velickovic, Ernest Pignon Ernest, Gilles Aillaud y Adami. O, en el arte contemporáneo,Archéologie du présent. (2003). Y muchas otras obras más. Si desea ver la integralidad de sus obras, visite la biografía de Michel Onfray.

Libro: El último testamento de Ben Zion Avrohom de James Frey

Todos construyeron sus imperios sobre sus estafas, asesinaron, torturaron, aterrorizaron miles de personas en el mundo. Todo esto en nombre de su super héroe barbudo, en el nombre de su ficción crucificado. En el mundo actual judíos, musulmanes y cristianos son esclavos o amos de esclavos que aman las cosas que no existen.

El libro, Le dernier testament de Ben Zion Avrohom (El último Testamento de Ben Zion Avrohom) del ensayista estadounidense, James  Frey, nos habla de un Mesías que llega a New York y, que todo las habitudes de la sociedad no son más que construcciones basados en dogmas religiosas erradas.

En este mundo actual, donde vemos a cada grupo del monoteísmo (judíos, cristianos y musulmanes) tratando de convencer a la gente que su religión es la verdad, según las escrituras presentes en la Tora, la Biblia y el Corán, creyendo en un paraíso o en fabulas, en lugar de dar o hacer aquí en la tierra a cada ser lo que más puede contribuir a la buena convivencias, es decir, dar mucho amor al prójimo.

Si usted conoce alguna de los libros anteriormente mencionado, se habrá dado cuenta las fábulas y mitos que se cuentan en ellas. En otros caso lleno de contradicciones. Por un lado dicen profesar el amor, pero cuando alguien no cree en eso, inmediatamente son condenados a castigos, que pueden llegar hasta la muerte, cegados por su fanatismo religioso. También nos dicen que algún día vendrá el salvador para cambiar o terminar con este mundo. Pero, ¿Qué diría usted si el mesías ya está aquí? ¿Que los textos del monoteísmo no son más que para cortar las libertades individuales? ¿Que Dios está de acuerdo con las relaciones hombre-hombre, mujer-mujer y hombre-mujer? ¿Que Dios liga a hombres y embaraza a las mujeres? ¿Que Dios no es como se nos presenta? sino quizá todo lo contrario sin prejuicios.

Es en este sentido que el talentoso escritor James Frey nos presenta su novela divididos en 16 capítulos, con nombres como Mariángeles, Carlos, Alexis, Esther, Jeremías, Adam, Mateo, Juan, Lucas, Juan, Lucas, etc. - nombres de algunos profetas.

Es solo un blanco, con ojos color pardo-negro, cabello marrón, nada de especial, es uno más de entre los miles de blancos que hay en los Estados Unidos. En absoluto nada de especial, así nos presenta Frey al mesías. Un hombre que sólo trae consigo una vieja maleta, una mochila en la espalda y se instala a vivir donde los únicos blancos son los judíos que venden.

Prácticamente un adolescente, a los 13 años Ben fue echado de la casa por su hermano mayor, Jacob, porque Ben tenía el cabello marrón y los ojos pardo-negro. Este jovencito en la clandestinidad se hace hombre. Luego de 16 años viviendo en ambientes completamente insalubres, abandonado a su suerte, Ben fue contratado para vigilar lugares donde se construían edificios, a pesar de su abandono personal, llega evolucionar en el trabajo. Empezó como un vigilante curioso, luego se ganó el cariño de los obreros rápidamente.

Un edifico de 40 pisos, de las cuales hasta los 30 ya estaban instaladas los vidrios en las ventanas. Desgraciadamente mientras la grúa elevaba los vidrios de 500 kilos aproximadamente cayeron sobre Ben, sobrevivir a este peso - imposible o casi.

En estado de coma, Ben fue evacuado al hospital, donde le hicieron 745 puntos internos y externos, se utilizaron 40 unidades de sangre. Ante todo pronóstico de los médicos, Ben sigue con vida.

Mientras Ben permanecía en el hospital, en estado muy delicado dice oír algo que no tiene ni voz de mujer, ni de hombre. Entonces confundido a este evento, decide contarle a un rabino.

El rabino estupefacto de escuchar a Ben, le pide que le diga a qué se aparece ya que no es hombre ni mujer y qué es lo que le dice. Dios está más allá, más allá de nuestra humanidad, de nuestra idea del hombre y de la mujer. La voz que escucha ben no es una voz idiota que viene del cielo, como en los libros de la Biblia o en los cines, o como hablan los religiosos fanáticos. Incluso no del todo es una voz. Es justamente esa presencia, esa sensación, ese estado en la cual aprende cosas, cosas que se le muestran.

Todo lo que Ben le decía, no entraba en armonía con lo que el rabino había entendido durante años sobre Dios, incluso le dice a Ben que todo eso podría ser a causa del accidente y los traumatismos a nivel cerebral. Pero Ben le demostró que no es así.

Por el hecho de haber besado a un hombre, amado, de cualquier manera que haya sido no creo que Dios condene a la muerte. Cito un texto:
A este punto de mi vida - hermanos y hermanas, yo sé - que Dios cree incluso, que el amor entre hombres y entre mujeres, es aún el amor. Y es una cosa magnifica, una cosa de la más magnífica que hubiera en el mundo. Que haya más. Bajo todas sus formas. Yo digo aleluya. (p.203)
El mundo va terminar, si no cambiamos de una vez nuestras actividades. Los dirigentes del mundo nos están matando, nos hacen creer que estamos progresando mientras nos están matando. No porque tienen un plan, sino porque son ignorante y codiciosos. Ellos piensan sólo en ellos. Piensan en sus dioses. Los cristianos piensan que tienen un Dios. Los musulmanes piensan que tienen un Dios. Los judíos piensan lo mismo. Todo el mundo cree que Dios está de su lado. Que Dios quiere que ellos maten, juzguen y dominen. Todos están equivocados.
Lo que dirige el mundo son los cuentos de hadas, Dios no forma parte de este mundo, Dios no juzga, Dios no da el poder, Dios es algo que esta fuera del entendimiento del hombre y de la mujer sobre la tierra. Dios no hace regalos de vida eterna. El don es la vida que tenemos y, cuando elle termina, termina todo. Olvídese de los 72 vírgenes que les espera para enseñarles a besar.

Todo lo que tenemos en la vida, son la presencia de los otros. Y todo lo que tenemos con ellos es el amor. El amor es solamente tomar cuidado los unos con los otros, besarse los unos con los otros.
El amor es algo que debemos sentir en nuestros corazones y, en nuestros cuerpos y, algo que debemos expresar sin temor a ser juzgados o condenados. El amor es algo que esté más allá de las reglas y dogmas. El amor es algo que esté más allá del bien y del mal, más allá de lo que es permitido y de lo que es prohibido. Y el amor está más allá de los que sólo tienen un conocimiento ínfimo y no tienen ninguna experiencia y que deciden la manera en la que debe ser experimentado o expresado o de los que tiene el derecho a experimentar o a expresarlo. (p.257)
El verdadero amor no es más otra cosa aquella que te hace sentir. Y si esto te hace sentir mejor, continúe haciéndolo, sin ocuparte de lo que otros pueden decir. Y si este amor podía cambiar la vida de alguien por qué no dárselo, lo cual sería la forma más simple de describir la presencia de Dios sobre la Tierra.
Son las personas que cambian la vida de otras. No un ser celestial o, un super héroe inventado, sino personas que cambian la vida de otras. (p.299)
En todo esto, el matrimonio  no sería sólo entre un hombre y una mujer que viven juntos, sino ante todo personas que se aman y deben disfrutar de este matrimonio, independientemente de su manera de amar.

Un libro muy bien escrito, según avanzaba en mi lectura, se hacía más interesante; cada frase, cada página, cada capítulo está contada con gran emoción, con profunda sensibilidad, e incluso invita a ciertas reflexiones sobre el monoteísmo.

Libro: Le dernier testament de Ben Zion Avrohom, James Frey (autor), Michel Marny (Traducción del inglés al Francés), 382 páginas, Flammarion (24 agosto 2011).